Raquel Figueroa: Inicio de año escolar 2021-2022 fue “un fracaso” marcado por ausencia de estudiantes y docentes

Nota de prensa

El inicio del año escolar 2021-2022, tras receso impuesto por la pandemia “fue un fracaso” lo cual contrasta con la oferta gubernamental planteado en el “Plan Victoria Bicentenaria inicio de clases”.

Su afirmación la argumenta con una investigación efectuada por el Movimiento de Educadores Simón Rodríguez (MESR) realizada en 246 planteles en 19 estados del país, incluyendo el Distrito Federal, dijo.

Asegura que en las primeras cuatro semanas del nuevo año escolar la participación estudiantil fue de apenas 47 % y de docentes 32%. La más baja en la historia educativa en un inicio de año escolar.

Los alumnos no acudieron a los planteles educativos porque la situación económica de sus padres no les permite costear los costos de pasajes, uniformes y útiles escolares. Además en 74,6 % no funcionó el Programa de Alimentación Escolar, añadió.

Vértices del Plan Victoria Bicentenaria quedó en tinta y papel

Figueroa manifestó que el Ejecutivo Nacional hizo alarde del “Plan Plan Victoria Bicentenaria inicio de clases”, conformado por diez vértices el cual a su juicio es una oferta engañosa”.

Explica que ante la situación sanitaria se promocionó “la bioseguridad retorno responsable y seguro”, no obstante, la realidad es 60,9 % de planteles no tienen agua y 89,1% y tampoco cuentan con equipos de bioseguridad para los docentes, quienes usan mascarillas de tala porque no pueden comprar la marca recomendada por especialistas.

De hecho, a la segunda semana de clases comenzó la suspensión de clases debido a contagios de covid-19.

–Amor para mi maestro: Héroes anónimos de la pandemia, es otro de los vértices, pero resulta que 67,4 % de los docentes no atendieron la convocatoria a clases porque han migrado debido a los bajos salarios y falta de seguridad social.

Lo más grave es que gran parte de esas vacantes están siendo ocupadas por “voluntarios” o por personas provenientes del “Plan Chamba Juvenil”, que no cumplen con el perfil profesional establecido en las leyes.

– Mi Escuela Bella: No paso de ser una promoción a juzgar por la realidad, ya que 83,3 % de los planteles no recibieron ni la mínima “gota de amor” por parte del Estado. Las evidencias están a la vista, afirmó Figueroa.

Además, cuestionó que sean los padres y representantes quienes hacen esfuerzos para comprar artículos de limpieza, oficina y materiales de clases, pues eso es responsabilidad del Estado.

En cuanto al vértice-Tecnología educativa: Escuela para la soberanía tecnológica, expresó que es una «ironía», ya que ninguna escuela se ha instalado sistema de WIFI a través de Cantv. Tampoco docentes y estudiantes ha sido dotados de tablet lo cual es fundamental para la interacción durante el proceso enseñanza-aprendizaje a distancia.

Con relación al vértice –La escuela en mi entorno: semillero para la comuna. La escuela hacia un rol geopolítico, Figueroa aseveró que el propósito del gobierno es “utilizar la educación como una aparato controlador”.

Fuente: El Informador