Primer día de huelga en la historia de Iberdrola con un seguimiento del 80%, según los sindicatos

NOTI-AMERICA.COM | ESPAÑA

La primera huelga en la historia de Iberdrola, convocada este viernes por la negociación del convenio laboral de la empresa, ha registrado un seguimiento aproximado del 80% entre los trabajadores. Estos datos han sido aportados por los sindicatos convocantes: UGT, CC.OO. y ELA. Por su parte, la empresa Iberdrola todavía no se ha pronunciado.

Reclaman paliar la pérdida del poder adquisitivo sufrido por la plantilla, que en España asciende a 9.500 trabajadores repartidos en unos 400 centros de trabajo. Los trabajadores han salido este viernes a la calle en distintas movilizaciones en el marco de la convocatoria.

En Bilbao, se han concentrado trabajadores en huelga de los centros de Iberdrola en Bizkaia, Gipuzkoa y Álava frente a la Torre Iberdrola, sede social de la eléctrica. Al igual que en el ámbito estatal, la protesta registra un seguimiento mayoritario, de un 80%, en los centros de la eléctrica en Euskadi y Navarra, según los convocantes.

A pesar de la concentración de buena parte de los trabajadores, muchos no han podido secundar la huelga ya que muchos están adscritos a los «importantes» servicios mínimos fijados por el Gobierno. Son cerca del 20%, aunque con variaciones según áreas. En La Rioja, por ejemplo, el 100% de los 70 trabajadores de la empresa han secundado la huelga, mientras que en regiones como Castilla-La Mancha o Navarra rozan el 90% del siguiente.

La Administración considera que es una empresa que presta un servicio esencial y que afronta su primera jornada de huelga semanas después del histórico apagón del 28 de abril que sufrió la península.

«Tenemos la intención de continuar, pero es verdad que tenemos la esperanza de que una empresa que es moderna dé pasos en la dirección adecuada», ha explicado Ismael Manzanal, secretario de Acción Sindical de UGT en Iberdrola, que ha insistido en que sólo piden «un mínimo: garantizar el poder adquisitivo que en estos cuatro años, con inflaciones de cerca del 18 %», no han tenido.

Según las estimaciones de Manzanal, la incidencia ha sido «masiva», prácticamente del «100%» en los centros de trabajo más pequeños de la eléctrica.

En declaraciones a los medios ante Torre Iberdrola, el representante sindical ha considerado «lamentable que, después de 124 años de historia de la empresa», se haya tenido que plantear «una huelga por un mínimo, que es el mantenimiento del poder adquisitivo y que la empresa se niega a reconocer».

A su juicio, «es absolutamente incomprensible que una compañía que gana 5.600 millones, con una previsión de llegar a 8.000 millones de beneficio en unos años, planteé para su plantilla unos incrementos salariales que, en ninguno de los escenarios, van a alcanzar el IPC».

El representante de UGT ha acusado a la empresa de practicar políticas de recursos humanos «enfocadas al marketing» y le ha instado a «bajar a la realidad y ver que la plantilla se está movilizando por un mínimo».

Sus declaraciones han sido secundadas por el representante de CC.OO. Rubén Sainz. Explica que en la eléctrica «contratan empresas de demoscopia que indican que Iberdrola es la empresa donde todo el mundo quiere trabajar en Euskadi». Pues «aquí está la prueba, la plantilla aquí detrás», manifestándose en la calle, ha señalado.

También el delegado de ELA en Iberdrola, Gorka López, ha criticado que «la empresa no quiere reconocer la pérdida de poder adquisitivo del 16,5% en los últimos 4 años», a lo que se suma que para este año ofrece una subida salarial máxima», cumpliendo unos objetivos «difíciles» de alcanzar, «del 2%».

El representante de ELA, sindicato que cuenta con la mayoría de la representación sindical en el conjunto de los centros del País Vasco y Navarra, donde operan unos 1.800 trabajadores, ha denunciado «la cerrazón absoluta» de la dirección de la eléctrica en la negociación del convenio.

Tras la jornada de huelga de este viernes, los sindicatos acudirán a la reunión de la mesa negociadora del convenio del próximo día 10 de junio expectantes ante la disposición que muestre la empresa.

En función de cómo evolucione la situación, «si tiene que haber más días de huelga, habrá», según han advertido desde CC.OO.

«Como la empresa no quiera dar el brazo a torcer, no quiera negociar de manera real y no quiera atender a las reivindicaciones mínimas que hemos puesto encima de la mesa, habrá más movilizaciones, más huelgas y más lucha», ha avisado también el delegado de ELA.