Rabat y Washington continúan sus planes de colaboración militar, lo que representa un importante respaldo para nación norteafricana en el marco de la estrategia global de defensa del continente africano. El jefe del Estado Mayor de los Estados Unidos, el general Mark Milley, visitó este domingo la capital marroquí donde se reunió con el ministro de Defensa alauí, Abdelatif Loudiyi, y con el teniente general Belkhir El Farouk, inspector general de las Fuerzas Armadas Reales (FAR). En ella se concretó que Marruecos es “un socio y un gran aliado para la nación norteamericana”. Según recogió la agencia de noticias marroquí, MAP, la reunión se celebró “con satisfacción”.
Durante estos encuentros, las dos partes expresaron su satisfacción por el nivel de excelencia alcanzado por las relaciones centenarias de afecto y colaboración, afianzadas por una asociación militar estratégica administrada por un significativo arsenal jurídico, en particular la hoja de ruta para la defensa 2020-2030, cooperación suscrita en octubre de 2020, durante la visita al Reino del secretario de Defensa estadounidense, como se indica en una nota de prensa del Estado Mayor General de las FAR. Tras repasar el estado de la cooperación bilateral en el campo de la defensa y las posibilidades de fortalecerla aún más, destacaron la relevancia del ejercicio combinado anual “African Lion” que representa una importante “palanca de éxito al servicio de la interoperabilidad de las Fuerzas Armadas”.
El ministro de Defensa marroquí mencionó la declaración tripartita firmada por el Reino de Marruecos, Estados Unidos e Israel en diciembre del 2020, como parte de los Acuerdos de Abraham, para fortalecer la paz y la estabilidad en el norte de África y Oriente Medio. Coincidiendo con este acuerdo a tres, el expresidente estadounidense Donald Trump se mostró conforme sobre la soberanía de Marruecos sobre el territorio del Sáhara Occidental, la excolonia española en disputa entre Rabat y los saharauis del Frente Polisario y controlada de facto por Marruecos en su mayoría. Milley también saludó las relaciones militares “fuertes, concretas y excelentes” que unen a Estados Unidos y Marruecos desde hace dos décadas que siendo las mayores del continente.
Según los expertos, la visita de alto nivel de militares estadounidenses a Marruecos es una fuerte señal al poder del general Said Chengriha en Argelia, a los mulás iraníes y al Hezbolá libanés, cuyas maniobras representan una amenaza creciente para la estabilidad en norte en África y en el Sahel. En esa reunión, que tuvo lugar en presencia de los jefes de Gabinete del Estado Mayor General marroquí y altos mandos militares estadounidenses, los dos oficiales instaron su deseo de vigorizar aún más la cooperación y la asociación estratégica entre las dos milicias, según el aviso del Estado Mayor de Marruecos.
La celebración de los African Lion se ha convertido en uno de los hitos más destacados en el calendario común de los Estados Unidos y Marruecos, que en estos años celebran su cercanía diplomática que, al mismo tiempo, se traduce en una alianza militar con fines estratégicos beneficiosos para ambas naciones. Precisamente, el Sáhara Occidental se ha convertido en uno de los elementos principales en torno a los que orbita la diplomacia exterior marroquí, después de que Mohamed VI haya logrado que tanto Estados Unidos como España reconozcan su plan de soberanía sobre la región. En el caso de nuestro país, fue el Gobierno de Pedro Sánchez el que, en una carta remitida al monarca de Marruecos, definió su nueva postura.
El apoyo de Washington al Reino gobernado por Mohamed VI está siendo de vital importancia para el desarrollo del país norteafricano. Desde primeros de año, los apoyos americanos en logística y estrategia han sido cruciales en la estabilidad de la región. Es un hecho que Marruecos ha entrado de lleno en la industrialización militar con la fabricación de drones y otros equipos militares, la modernización de sus F-16 y la futura recepción de los helicópteros Apache. Parte de los planes del reino marroquí pasan por crear un robusto tejido industrial y militar a nivel nacional. En el marco continuo de desarrollo, investigación e impulso de las capacidades de defensa aérea de las FAR, la administración central del Reino llegó a un acuerdo con la empresa norteamericana aeroespacial y de defensa L3HARRIS para la implantación de los más novedosos y efectivos métodos de defensa.
El acuerdo firmado entre las delegaciones militares de ambos Estados refleja la modernización y el fortalecimiento de las capacidades operativas de las Fuerzas Armadas de Marruecos (RFA), además del desarrollo de la industria militar en Marruecos. Según un comunicado del Ministerio de Defensa marroquí emitido en febrero, se afirmaba que este acuerdo supone reforzar la independencia de la RFA. Con el fin de optimizar la Defensa, el país norteafricano tiene la intención de continuar su carrera armamentística de la mano de Estados Unidos. La nación alauí se está convirtiendo poco a poco en una potencia militar regional y global, que basa buena parte de su potencial en una fuerza aérea moderna, como es su RFA, que, debidamente apoyada por sistemas antiaéreos, está en el camino correcto para obtener el necesario efecto disuasorio ante sus enemigos.
Coordinador de América: José Antonio Sierra.
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