PRESIDENTE PERUANO ANTE LA ONU

NOTI-AMÉRICA PERÚ

Por Geomar Pacheco Rivera

El presidente de la República, Pedro Castillo Terrones, sostuvo, durante su mensaje en el marco de la 77° sesión de la Asamblea General de la Naciones Unidas, que la “gobernabilidad democrática exige el respeto a la institucionalidad y sobre todo a la voluntad popular”.

“Los golpes de Estado, sea cual sea su modalidad o el poder del Estado que los impulse, son ilegítimos pues atentan contra la expresión soberana de la voluntad popular”, agregó ante la sede del Plenario de la Asamblea General, en Nueva York, Estados Unidos.

Señaló que “toda crisis de gobernabilidad o de enfrentamiento entre los poderes del Estado debe resolverse con el diálogo, la concertación y el pleno respeto de los resultados electorales”.

Además, Castillo reafirmó que en “este mundo donde las tendencias al conflicto se acrecientan, como en las crisis políticas internas, necesitamos de cuatro pilares para defender la gobernanza democrática: el respeto a los pueblos, la voluntad de solucionar los conflictos por la vía de la negociación, el respeto a los derechos humanos y la institucionalidad del Estado de derecho”.

Foto: ANDINA

Antes de culminar su discurso, el jefe de Estado afirmó ser presidente de un país multiétnico y pluricultural, con más de tres mil años de desarrollo de altas civilizaciones, que ha tenido dificultades para eliminar el racismo y la desigualdad social.

“Mi gobierno simboliza las demandas, aspiraciones e ilusiones de quienes han tenido nada o muy poco, para integrarse a la vida nacional como actores de su propio destino”, subrayó. Aseveró que la agenda de la inclusión social en el Perú prioriza el principio de no dejar a nadie atrás.

“La agenda de inclusión social en el Perú busca una inclusión que se materialice en beneficio de todos, especialmente de los más pobres y vulnerables. Un mundo para todos”, finalizó.

El mensaje de Castillo ante la Asamblea fue una ratificación de ideales, los cuales no ha podido concretar en el año y dos meses de gobierno que lleva adelante. Tiene en su haber decisiones que lo condenan ante la opinión pública: el rango de descalificación alcanza más del 70 por ciento de desaprobación a su gestión.

El Perú vive la crisis política, económica y social más grave de su historia en los últimos 30 años. Los peruanos tenemos que resolver la situación generada por la falta de experiencia y conocimiento, respetando las normas vigentes y buscando la paz social.

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