¿Cómo saber cuál es el lado correcto para ponerse una lentilla?

La vista es el órgano principal de un ser humano, es del que más dependemos para desenvolvernos y para detectar potenciales peligros en el horizonte, desde hace miles de años, el hombre ha ido desarrollando la agudeza de la visión, su cuidado y preservación es muy importante en la actualidad. Por ende todos los seres humanos en cierto momento de nuestra vida visitamos al oftalmólogo, buscando no solo consejos, si no también soluciones a problemas que pudieran estar presentando. Es allí en donde aparecen las gafas o lentes convencionales que satisfacen las necesidades ordinarias. Sin embargo, hay personas que no se adaptan a ellos, por ende optan por las lentillas baratas online o lentes de contacto, son más prácticos y satisfacen sus necesidades.

Pero antes de conocer más sobre ellos, las personas que los manipulen deben siempre lavar bien sus manos con un jabón suave, enjuagarlas por completo y sécalas con una toalla sin pelusas antes de tocar sus lentes. Es decir, no puede existir ningún tipo de residuo en sus manos. Lo próximo para usarlas es verificar que no estén al revés. Para ello se debe colocar el lente en la punta del dedo índice y verificar su perfil. El lente debe asumir una forma natural, curvada, similar a un cuenco. Si los bordes del lente tienden a apuntar hacia afuera, el lente está al revés.

Para colocartelo debes apretar suavemente el lente entre el pulgar y el dedo índice. Los bordes deben tornarse hacia adentro. Si el lente está del lado del revés, los bordes se tornarán ligeramente hacia afuera. Coloca el lente sobre la punta del dedo índice y, mirando el lente, localiza los números 1-2-3. 1-2-3 indica una orientación correcta mientras que una inversa de 1-2-3 indica que el lente está del lado del revés. Si el lente está del lado del revés (1-2-3 inverso), invierte el lente y localiza los números nuevamente para confirmar la orientación adecuada del lente.

Mientras tienes el lente en tu dedo índice, utiliza la otra mano para mantener levantado el párpado superior y así evitar parpadear. Empuja el párpado inferior hacia abajo con los demás dedos de la mano con la que estás sosteniendo el lente. Esto es un auténtico juego de equilibrio. Mueve el lente directamente hacia tu ojo con estabilidad. Mira hacia arriba mientras colocas el lente en tu ojo, suelta despacio el párpado y cierra el ojo un momento para permitir que el lente se acomode. Repite los mismos pasos con el otro ojo.

Es muy IMPORTANTE que tengas claro que bajo ninguna circunstancia puedes enjuagar los lentes o el estuche con agua corriente.

Por lo general acostumbrarte a las lentillas varía de persona a persona, pero si sientes que ha pasado mucho tiempo, la mejor forma de descubrir por qué sientes incomodidad y qué puedes hacer al respecto, es consultar a tu profesional de la visión.

Las lentillas se mueven ¿Es normal? Con una adaptación correcta, las lentillas deben permanecer en su lugar casi todo el tiempo. Incluso en la rara ocasión en que un lente se mueva de su lugar, generalmente se mantiene en el ojo hasta que lo colocas en su lugar de nuevo.