La UE acuerda crear un fondo de reconstrucción post-coronavirus por: María G. Zornoza

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Una máxima rige las grandes decisiones en el bloque comunitario: estamos de acuerdo en el objetivo, pero no tanto en cómo llegar hasta él. La cuarta cumbre europea sobre la respuesta al Covid-19 concluye según lo esperado. Los Veintisiete sientan las bases para crear un fondo de reconstrucción europea. Además, han dado un mandato a la Comisión para que presente una nueva propuesta presupuestaria y han mostrado unidad europea en un momento de divergencia.

«Hemos acordado crear un fondo de reconstrucción, que es necesario y urgente», ha señalado Charles Michel, presidente del Consejo Europeo, una vez finalizada la cumbre telemática. La cita ha durado poco más de cuatro horas y no ha deparado sorpresas. La Unión Europea sienta las bases para la creación de un fondo de reconstrucción europea. Pero queda mucho recorrido hasta llegar él. Muchos detalles, flecos pendientes y negociaciones duras para determinar su uso, financiación, alcance o duración. «Tiene que ser lo suficientemente grande para afrontar esta crisis y estar centrado en los sectores y las partes geográficas de Europa más afectadas», ha enfatizado el belga.

El acuerdo alcanzado este jueves incluye que esta herramienta sea parte del Marco Financiero Plurianual para el periodo entre 2021 y 2027. Unas cuentas que, por cierto, nunca llegaron a cuadrarse por las divisiones entre los frugales y los amigos de la solidaridad. La Comisión que lidera Ursula von der Leyen espera presentar una propuesta al respecto durante “la segunda o tercera semana de mayo”. Las nuevas cifras «hablarán en billón y no ya en millones», ha adelantado la alemana en rueda de prensa. “Estoy convencida de que solo hay un instrumento que puede abarcar la magnitud de esta recuperación: el presupuesto europeo, que debe estar vinculado al fondo de recuperación”, ha señalado en rueda de prensa.

Sin embargo, lo más difícil arranca ahora. La nueva batalla se traslada a cómo los flujos de dinero contemplados en este fondo llegarán a los países más afectados. Mientras España o Italia exigen que se produzcan a través de transferencias para evitar que se dispare su deuda pública, Países Bajos o Austria solo aceptan –de momento- que sean préstamos. Von der Leyen ha augurado que se necesitará un “equilibrio” de ambos “porque el mandato es claro”. El propio canciller austríaco Sebastian Kurz ha señalado tras el encuentro que “la recuperación llegará a través de créditos” y que la “mutualización de la deuda no es aceptable”.

El encuentro no ha contado con una declaración conjunta. Estaba pensado. Michel quería evitar que la discusión se enrocase en los términos y comas de cada palabra que se acuerda a Veintisiete. Algo mucho más difícil en los tiempos del coronavirus por las dificultades técnicas de las videoconferencias. Todo apunta a que los líderes se reunirán de forma presencial en el futuro cercano. Fuentes europeas vaticinan que una cumbre presencial podría tener lugar en junio o julio.

En definitiva, el de hoy ha sido un primer encuentro para medir la temperatura y para dejar claro que una esta crisis es simétrica y no puede degenerar en una recuperación asimétrica. «Esto tendrá efectos masivos sobre la igualdad de condiciones salvo que tomemos medidas para contrarrestarlo», ha señalado Von der Leyen. Los líderes europeos han advertido estos días que dejar solos a los países más afectados como España e Italia podría poner en riesgo el Mercado Interior, la zona euro o el propio espacio Schengen.

Una de las propuestas que había ganado fuerza durante los últimos días era la presentada por España. Pero los planes españoles de deuda perpetua o financiación del billón y medio a través de transferencias se han topado con la negativa de los más ortodoxos. «España estaba pidiendo un fondo de entre un billón y un billón y medio. Todavía no hay suficiente convergencia. Hay que evitar el sobrendueudamiento de algunos países», ha señalado Arancha González Laya, ministra de Exteriores y UE, en rueda de prensa, que ha pedido “más ambición” al bloque. «Observamos un cambio de tono en el debate, vemos el inicio de una dinámica de negociación y a España en el centro del juego», ha celebrado en la valoración de la cita. Pedro Sánchez ha sido el único gran líder europeo que no ha comparecido.

Por otro lado, los Veintisiete han dado luz verde al paquete de medio billón de euros para ayudas a países, ciudadanos y empresas acordado hace dos semanas por el Eurogrupo. Han pedido que esté operativo para el próximo 1 de junio. También han establecido celebrar una cumbre europea sobre Balcanes –que iba a tener lugar en Zagreb de forma presencial- por videoconferencia para el próximo 6 de mayo.

Fuente: aquieuropa.com