Pequeño partido alemán ofrece candidatura europea a Puigdemont
Berlín, – El Partido Alemán de Centro (DZP) ofreció al ex presidente catalán Carles Puigdemont ser cabeza de lista para las elecciones europeas de mayo del próximo año, como confirmó hoy a dpa su secretario general, Christian Otte.
La cúpula de esta pequeña formación, fundada en 1870 y que se autodenomina como «el partido más antiguo de Alemania», tomó la decisión el lunes de esta semana.
«Según expertos en derecho, Puigdemont puede presentar su candidatura al Parlamento Europeo, ya que que la ley electoral establece que un ciudadano de la UE puede hacerlo en otro Estado miembro cuando tiene allí su residencia», dice la nota de prensa del DZP en la que anuncia su decisión.
Puigdemont fue detenido en Alemania el 25 de marzo en virtud de una orden europea de arresto emitida por la Justicia española cuando intentaba volver a Bruselas procedente de Finlandia.
Un tribunal alemán descartó el delito de rebelión, imputado a Puigdemont en España, y puso en libertad al político catalán a cambio de una fianza de 75.000 euros.
Por su parte, los parlamentarios del partido soberanista de Puigdemont, Junts per Catalunya (JxCat), se reúnen mañana sábado en Berlín para intentar desbloquear la investidura de un nuevo presidente por el Parlamento autónomico y evitar así la convocatoria de nuevas elecciones.
El encuentro de la fracción parlamentaria de JxCat en la capital alemana llega sin un orden del día oficial, pero con todos los escenarios posibles sobre la mesa, reconocieron a dpa fuentes de la fracción parlamentaria.
En la última reunión de JxCat en Berlín el 18 de abril, el portavoz parlamentario adjunto del partido, Eduard Pujol, insistió en que todas las candidaturas, incluida la de Puigdemont, seguían siendo posibles y que su principal objetivo era evitar elecciones, que se convocarán automáticamente si Cataluña sigue sin nuevo gobierno el próximo día 22 de mayo.
El hecho de que JxCat admita ahora «todos los escenarios», sumado a las voces procedentes desde la misma bancada de Puigdemont que hablaban esta semana de una posible presidencia provisional, deja entrever que el líder independentista podría dar un paso al costado y dejar así vía libre a un candidato sin causas judiciales abiertas.
El entorno de Puigdemont, que sigue considerándolo el «president» legítimo de Cataluña, insistió las últimas semanas en que su intención sigue siendo presentarse a la reelección presidencial ante el Parlamento catalán, pese al bloqueo que mantiene el Tribunal Constitucional español a su candidatura.
La reforma de la Ley de presidencia aprobada hoy por el Parlamento catalán prevé una eventual investidura a distancia de Puigdemont, posibilidad que ya fue bloqueada por el Constitucional en enero y que el Gobierno central volverá impugnar con toda probabilidad.
«La semana que viene podría haber un debate de investidura», declaró el pasado martes a la radio pública catalana Pere Aragonès, presidente adjunto de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), el otro gran partido independentista catalán cuyos votos necesita JxCat para elegir nuevo presidente y formar gobierno.
Tanto JxCat como ERC subrayan que su objetivo fundamental es evitar la convocatoria de nuevos comicios, punto en el que coinciden con el ex presidente Puigdemont.
Si la reunión de este fin de semana en Berlín permite un desbloqueo, las hasta ahora principales candidaturas, la de Puigdemont y las de Jordi Sánchez y Jordi Turull (ambos en prisión preventiva como procesados por delitos vinculados al plan independentista), podrían dejar paso a otros nombres como el de Elsa Artadi, primera portavoz parlamentaria de JxCat.
En todo caso, y como apuntaron fuentes de JxCat a diversos medios catalanes, la elección del nuevo nombre debería contar con el beneplácito de Puigdemont en la reunión que se celebra este fin de semana en Berlín.
En caso de desbloqueo y si se celebra con éxito una sesión de investidura la próxima semana, la región volvería a tener presidente y ejecutivo propios por primera vez desde el 27 de octubre, día en que el Gobierno central intervino la autonomía de Cataluña después de que el Parlamento regional aprobara crear una república independiente.
Fuente(dpa)
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