Petróleo y algo más… Por Luis Hernández.

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Petróleo y algo más…

Por Luis Hernández.

El miedo, si el líder laboral tiene miedo, los trabajadores a los cuales representa tienen pánico, por eso el líder laboral debe ser una persona ajustada al momento y mantener ese espíritu de lucha que lo lleva en la búsqueda de mantener o mejorar la calidad de vida de sus representados.. La lucha laboral en Venezuela cada día se hace más preocupante, porque el sistema no permite que se le critique o se le oriente para encontrar soluciones que vayan en función de mejoras laborales para los trabajadores, y no perder la libertad… ¿Cuántos líderes laborales están privados de libertad?. Levantar la voz no puede ser delito en un sistema democrático, la voz del trabajador debe ser escuchada y tratar en lo posible de satisfacer sus necesidades laborales, económicas, políticas y sociales… No se puede perder el norte, ni los logros de más de cien años de lucha obrera trabajadora… En 1.993, la Junta Directiva de PDVSA aprobó la Constitución de la “Asociación Civil Administradora de los Fondos de Pensiones de Petróleos de Venezuela y sus filiales APJPDV, para que a través de la misma como persona jurídica distinta a PDVSA, invirtiera en las Reservas Actuariales y con su rendimiento poder aumentar el valor de las pensiones… Un alto componente del fondo se colocó en Dólares con la finalidad de mejorar su rendimiento, esta política administrativa duró desde 1.993 hasta 2002, momentos de transparencia administrativa en el Fondo de Pensiones… Un componente del Personal Jubilado asistía a las reuniones con los gerentes de PDVSA, pero a partir del 2002, a los Jubilados no se les permitió asistir a tales reuniones como oyente, y bajo amenazas no se les permitió asistir a las subsiguientes reuniones… Y se hicieron dueños del Fondo de Pensiones… En el año 2005, la calidad de vida de los Jubilados comenzó un proceso de desmejoramiento. Los Estatutos del Fondo dejaron de cumplirse, el representante de AJIP, Sr. Borges, nunca reportó acciones tomadas, y esa incertidumbre se acentuó en el tiempo, y llegó el año 2014, donde se atribuyeron la propiedad de los haberes del fondo mediante una reforma protocolizada de sus estatutos llevada a cabo en noviembre del mismo año, lo cual fue detectado por los jubilados en agosto del 2016, en una revisión realizada en la Oficina del Registro Público… ¿Dónde estaba el representante, Sr. Borges, quien residía en Caracas y no se dio cuenta de tal fechoría contra el Fondo de Pensiones?… Se cumpliría el dicho de “ZAMURO CUIDANDO CARNE”…  SEGUIMOS SIN COMBUSTIBLES Y LAS SIEMBRAS SE HACEN MÁS DIFÍCILES… ¡HAMBRE, SUDOR Y LÁGRIMAS!…