Turismo ecuestre en México, una apuesta al desarrollo local mediante el ecoturismo. Autor: Lic. Norberto A. Velazquez Gonzalez

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Turismo ecuestre en México, una apuesta al desarrollo local mediante el ecoturismo.

Autor: Lic. Norberto A. Velazquez Gonzalez

Adriano Romero, encontró durante la pandemia una forma de conectar a viajeros que necesitaban escapar de las multitudes presentes en las ciudades, con las zonas rurales del centro de México que rodean al volcán Popocatépetl, mediante un proyecto de cabalgatas y rescate equino.

Utilizando plataformas de redes sociales para atraer clientes, promovió un esquema de comisiones que permite a los ranchos locales rentar sus caballos para obtener ingresos adicionales, a la par de solventar los costos crecientes de la manutención y cuidado de estos animales.

Llamado originalmente “Cabalgatas Puebla”, este proyecto ya cuenta con múltiples ranchos asociados en dicho estado de México y próximamente, en Morelos dentro de la Hacienda San Gabriel de las Palmas y en las playas de Puerto Escondido, Oaxaca.

El senderismo ecuestre se encuentra en crecimiento en países cuya belleza natural es el principal atractivo. Desde los paisajes de Islandia, los desiertos de Dubái, las pirámides de Egipto, hasta las selvas de Colombia y las playas del caribe, podemos encontrar alguna agencia o pequeño negocio que ofrezca estos servicios.

Desde luego que no todos cumplen con los estándares de bienestar animal y cuidado necesario, pero poco a poco los viajeros conscientes y las nuevas regulaciones, están haciendo de esta actividad una forma sustentable y ética, de aportar al desarrollo de las economías locales.

La apuesta en el contexto mexicano es la de encontrar aquellos ranchos cuyos propietarios vean la oportunidad de fomentar el ecoturismo, en una red integrada por personas dispuestas a mejorar las condiciones de vida de los caballos.

“Podemos ser parte de una red internacional de personas que buscan reconectar con la naturaleza, que buscan experiencias auténticas y que aman a estos animales” agrega Adriano Romero.

Sin duda un esfuerzo que no ha pasado desapercibido y que poco a poco a constituido el sustento de varias familias poblanas, cuyos hijos ahora tiene la oportunidad de aprender y soñar con un modo de vida y una tradición, que se encuentra en extinción con cada camino pavimentado.

Se estima que México es el tercer país con más caballos del mundo, solo después de Estados Unidos y China. Unos 6 millones de equinos que merecen ser cuidados y respetados, independientemente de la actividad o deporte para los que han sido adquiridos.

Participar en una cabalgata de un negocio rural, cuyos caballos son tratados con dignidad, representa un valioso aporte a la calidad de vida de animales que pueden vivir más de 25 años y que, de otra manera, terminan siendo explotados o procesados como alimento.