Buscan «el premio de la lotería»: Inversores despiertan interés por los bonos de Venezuela y el Líbano

NOTI-AMERICA VENEZUELA

Los inversores siguen de manera minuciosa las señales de «un nuevo acercamiento» entre los gobiernos de Estados Unidos y de Venezuela, tras la toma de posesión de Donald Trump como presidente.

Inversores han despertado el interés por los bonos de países emergentes como Venezuela y el Líbano, tras un leve repunte de estos títulos.

Según publicó Bloomberg, las economías de ambos países son consideradas «catastróficas», dada la crisis migratoria y la inflación que padecen. Sin embargo, los inversionistas estarían buscando «el premio de la lotería».

Claudio Zampa, fundador de Mangart Capital Management Ltd., con sede en Suiza, acotó que «cuando los bonos están en el rango bajo de 15 a 19 años, la gente compra, porque lo ve como una opción».

Agregó que otros países se han reestructurado, como es el caso de Argentina, que «lo está haciendo mejor, por lo que los inversores más agresivos dicen: ‘¿por qué no?’».

En el caso de Venezuela, los operadores de JPMorgan Securities tildaron los bonos de esta nación como una «operación de mayor convicción de 2025».

Cabe precisar que las perspectivas son «más sombrías» para el caso de Venezuela, por la relación que existe entre los gobiernos de Estados Unidos y de la nación caribeña.

El director de operaciones de la firma de inversión española Auriga Global Investors SV SA, Francesco Marani, expresó que existen expectativas sobre la manera en que Donald Trump adoptará la política hacia Venezuela.

Ante ello, resaltó que algunos inversores están divididos sobre si el mandatario estadounidense tendrá una postura más dura o negociará con el gobierno del presidente Nicolás Maduro, con el fin de frenar la migración venezolana.

Por su parte, Ajata Mediratta, presidente de Greylock Capital Management LLC, añadió que si bien Trump ha designado a personas que son críticas «con el gobierno de Maduro, existe un escenario en el que se canse del impasse y llegue a un acuerdo».

«Su campaña se basó en una plataforma de ‘Estados Unidos primero’, que se centra en precios de energía más baratos y una menor inmigración ilegal, no en promover la democracia», sumó.