EL USURPADOR PROCUBANO ES  ¿OBRERISTA O DELINCUENTE? Por: Marlon S Jiménez García

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EL USURPADOR PROCUBANO ES  ¿OBRERISTA O DELINCUENTE?

Por: Marlon S Jiménez García

Antes de desarrollar el tema, es importante conocer en detalles que significa la palabra obrerista. Asimismo es importante saber el significado de la palabra delincuente.

Según el diccionario, OBRERISTA es 1) De los obreros o del obrerismo o relacionados con ellos; 2) Que es partidario del obrerismo. Y delincuencia es en el diccionario jurídico es, la persona que interviene en un delito (acciones u omisiones dolosas o culposa penadas por la ley), sujeto activo del mismo en calidad de autor, cómplice o encubridor o de cualquier actuación punible.

Son muchas las dudas que le genera a la población cuando personas inescrupulosas utilizan el verbo como artificio rimbombante para engañar, para engatusar, para crear falsas expectativas en las personas con el afán de lograr de ellos un apoyo para una coyuntura política; en eso los comunistas en toda la historia, desde la Revolución Francesa para acá (donde nacieron esas lacras), han sido artífices de primera línea, pudiéramos decir, que mentir es su “filosofía de vida”.

Causa estupor e indignación escuchar al usurpador procubano considerarse un “Presidente obrerista”. La realidad es que nunca los trabajadores, en su conjunto, han estado en peores condiciones, no solo desde el punto de vista salarial, sino también en lo social y en lo ético, como están ahora; nunca antes en el contexto laboral había existido en un Gobierno, políticas restrictivas que incidieran como vorágine de forma negativa en la calidad de vida de los entes laborantes y de los dependientes de estos. Éste régimen comunista en conjunción con el fascismo, es y será, una cosa inútil y despreciable, el hecho de llamarse ese personaje  “presidente obrerista”, manifiesta de forma inequívoca que la “realidad construye la verdad”, porque esa afirmación del USURPADOR procubano, confirma que todo se debe a un engaño o artificio encubierto, propio y natural de los ñángaras, como los conocemos desde  tiempos de la universidad autónoma; que por cierto, hoy son enemigos viscerales de las mismas. Ya no pelean por el presupuesto justo, sino piden a gritos el cierre de la universidad porque ahora es de derecha..

La “realidad y verdad” es que tanto el Chávez antes, como el USURPADOR ahora, son anti obreristas y anti profesionales, son tramposos y malos cumplidores de sus obligaciones. En Venezuela la deuda interna, desde el punto de vista laboral en el sector público, la llevaron a CERO, cuando le quitaron los 14 ceros al bolívar por la hiperinflación reinante del país los arruinaron a todos los empleados públicos. Es decir, el régimen ex profesamente borró de la lista las deudas a todos los trabajadores del sector público.

.En pocas palabras, le hicieron a todos los trabajadores del país, sin excepción, el mayor robo del siglo, al patrimonio correspondiente a sus relaciones de trabajo, perdieron hasta la unidad familiar, en virtud de que con esos salarios, no podían ni siquiera satisfacer las necesidades fundamentales y los hijos y nietos huyeron en estampida del país a buscar un nuevo aliento extrapolando fronteras en otros países para ayudar a la familia a subsistir.

Doce años después de ese desmadre, más por presión internacional (OIT, CPI) que por la nacional (proscribieron de hecho los sindicatos y las Convenciones Colectivas) el USURPADOR aumenta el salario mínimo Nacional S.M.N de 1,3$ a 30$ (calculados al valor del bolívar con respecto al dólar, según el BCV)  y que hoy, a casi un año después la inflación lo tiene a un equivalente un poco superior a los 4$ y que de seguir así la macabra economía del país, pronto llegará también a CERO. Es  el salario mínimo más bajo del mundo y de allí por lógica, las tablas salariales sufren también un ajuste, que no remedia para nada las condiciones de miseria en la que viven la imensa mayoría de los venezolanos. El régimen comunista y fascista, a pesar del hambre inconmensurable de la población se niega , lo que por la CN le corresponde en fijar un salario mínimo, argumentando un eslogan utilizado por CUBA en los años 60 y 70 de SANCIONES Y BLOQUEOS que nadie les cree por la propia dinámica feroz del manejo de recursos en cosas superfluas como CAMIONETAS  de 120 mil$$, de abastecer BODEGONES con productos de marcas costosas y traídas nada más que del imperio, construir estadios de lujo (sin necesidad) solo para aparentar que en Venezuela las cosas están bien y esos hechos los desnuda ante la opinión pública de que es mentira lo de las SANCIONES y BLOQUEOS, realizar negocios con Irán, Turquía y otros países para desarrollar la industria petrolera, la cual arruinaron a su más mínima expresión y otras actividades fundamentales para el desarrollo nacional. En este país no hay Estado de Derecho, obviamente no se respeta la CN ni leyes, entonces es el USURPADOR quien tiene, por su cargo como AUTÓCRATA, la potestad de imponer salarios y no lo hace con esos argumentos y subyace de ello el interés de los comunistas de seguir empobreciendo a la población para que continúen en estampida huyendo del hambre, miseria y hambre impuesto por MANDATO CUBANO; por supuesto, la “mano pelúa” favorece a unos sectores más que otros; por supuesto, claro, los fieles a la REVOLUCIÖN DEL SIGLO XXI obtienen su buena tajada por “jalabolas” entre otras consideraciones crematísticas. La mayoría sufre los rigores planificados de la apatía gubernamental. El USURPADOR Procubano, de acuerdo a la definición es un DELINCUENTE, por eso está acusado ante la CPI y tiene recompensa por su captura.

Hablamos de los salarios porque es la solicitud mayor demandada en estos momentos, pero, los trabajadores y sus familias son las grandes víctimas de la inercia del régimen, en lo que respecta a la seguridad social, vivienda, alimentación; hoy en Venezuela hay un deterioro superlativo de la “Calidad de Vida”, incluyendo a ese número, cada vez mas pequeño, del LUMPEN madurista que sale a la calle a gritar ASí, ASÍ ,ASÍ ES QUE SE GOBIERNA, como lo dicen todas las encuestas, menos las que hace Luís Vicente León: el 82% de los venezolanos solo hace una sola comida diaria; la percepción es que vamos de “peor a malo”.

A todas estas los trabajadores, jubilados y pensionados están en la calle luchando por sus derechos históricos y ahora se integrarán los diferentes sectores de la Sociedad Civil; es decir, todo el país despertó y saben, están consciente que, es en la calle donde está la solución a nuestros problemas y mientras más se radicalice el régimen se radicalizará, en los mismos incrementos, la estadía en las calles. El régimen tiene la palabra.

Profesor Universitario

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