Venezuela Está A Las Puertas De Una Epidemia Gastrointestinal

Según reportes de Diario La Calle: «El ex presidente del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales y médico, alertó que Venezuela está a las puertas de una epidemia gastrointestinal, en virtud del consumo de agua contaminada, ante la ausencia del vital liquido».

En el programa República Ciudadana conducido por Rubén Roca y Cástor González a través de Radio Sintonía y de Twitterlive @centropopularve los días miércoles, el experto médico venezolano puntualizó que el desgobierno no tiene la más mínima noción de la catástrofe que han imbuido al pueblo.

– Estamos ante la presencia de un holocausto contra el pueblo venezolano. No obstante, existen patologías y enfermedades de vida por falta de agua. Diarrea, Hepatitis A, y Paludismo entre otras, ya están haciendo estragos en la población, y lo triste y lamentable de todo esto es que en los hospitales y centros de salud, no hay ni agua ni tratamientos para suministrarles, enfatizó.

En este orden de ideas amplió que estamos frente a un cierre técnico del sistema de salud venezolano. “De tener un servicio tercermundista, pasamos al sexto mundo. Esta realidad se traslada a la salud privada, por la imposibilidad de importación de insumos y materiales quirúrgicos y otros”, dijo.

Asimismo, y ante la tragedia sanitaria que se vive en Venezuela, especialmente por la falta de agua potable, el especialista recomendó que ante la ausencia de pastilla potabilizadoras, lo recomendado es usar una gota de cloro por cada litro de agua, y si la misma es turbia, colarla y hervirla de uno a tres minutos a fin de que los estragos gastrointestinales no sean tan impactantes en el organismo.

Rafael Arreaza expuso que Venezuela es el segundo país con la reserva hídrica más grande del mundo, y paradójicamente hoy los venezolanos mueren de sed, lo que atribuyó a la burocracia del Estado y a la falta de disposición de sacar a Venezuela adelante.

Finalmente manifestó que a su juicio estamos frente a una receta de dominación y sometimiento de la gente, propia de los regímenes del mundo, a través de la cual se busca controlar a la sociedad y tenerlos ocupados haciendo colas hasta por una gota de agua, sin electricidad y con muchas carencias.