“El Rey” Félix Hernández busca salir de un exclusivo pero indeseable grupo Por: Marco Gámez
“El Rey” Félix Hernández busca salir de un exclusivo pero indeseable grupo
Foto: Cortesía @radiografiadep
Por: Marco Gámez
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La dicha nunca es completa. Un lanzador que ganó el premio Cy Young en 2009, lanzó un juego perfecto en 2012, fue seleccionado a seis Juegos Estrellas, dominó la Liga Americana en: efectividad, episodios lanzados, juegos comenzados y blanqueos, parecería tener todo para ser feliz, pero…un momento, la destacada carrera de un pelotero en Grandes Ligas podría, a la postre, pasar inadvertida si nunca actuó en una Serie Mundial, ni siquiera en un partido de postemporada, que ahora tiene hasta cuatro etapas. Total, como dicen en el argot beisbolero, nunca estuvo en “la comida”.
Félix Hernández ha sido noticia este año por temas agridulces. En principio, porque se acercaba a las 400 aperturas en Las Mayores, luego por la gran campaña que vive su único equipo en la pelota profesional, Marineros de Seattle. Pero, también porque jamás ha actuado en postemporada y últimamente, ocupó titulares de páginas y programas deportivos al ser enviado, por primera vez en su trayectoria, al bullpen
El derecho totaliza, hasta el domingo 12 de agosto, 398 aperturas desde que fue ascendido cuando Mariah Carey dominaba las listas musicales con “We belong together”. Era agosto de 2005 y lo llamaron para reemplazar en la rotación naviera a Aaron Sele.
A los 32 años mucho pensarían que le resta lo suficiente en el tanque para lanzar en el mejor beisbol del mundo. Sin embargo, deberá reinventarse como pitcher porque su recta escasamente, hoy en día, roza las 90 millas después de registrar velocidades entre 95 y 97 mph.
El Gerente General de los Marineros, y ex lanzador de Grandes Ligas, Jerry Dipoto, espera que Hernández supere su pérdida de velocidad y se convierta en un pitcher de colocación de envíos y experiencia como hizo Frank Tanana. ”Está pagando peaje a todos esos años de tantos episodios laborados. No todos los días tenemos un Nolan Ryan que aun a los 42 años era un lanzallamas”, expresó el ejecutivo de la divisa que batalla por quedarse con uno de los dos cupos de Comodín en el joven circuito.
A fuerza de recta y sliders, “El Rey” emocionó a la fanaticada de Seattle durante todos esos encuentros, pero ninguno fue en postemporada. Hasta el domingo 12 de agosto suma 2.626,1 episodios lanzados. Su récord actual es de ocho triunfos, 10 caídas y efectividad de 5,73; distantes del 11 y 9, con efectividad de 4,36 que se le proyectaba.
El nacido en el estado Carabobo, de Venezuela, estaba a punto de ser el séptimo lanzador en Grandes Ligas que llega a 400 aperturas o más sin haber aparecido en un juego de la ruta hacia el campeonato, porque, de hecho, la sequía de Seattle sin ir a los llamados playoffs es de 16 años, ya que la última vez que estuvo en esa altura del campeonato fue en 2001.
Los ya retirados Fergunson Jenkins con 594, Jim Bunning: 519, Ted Lyons: 484, Mel Harder: 433, Larry Jackson: 429 y Wilbur Cooper son quienes conforman el selecto, pero poco deseado, club de las 400 aperturas sin conocer lo que es ir al montículo en postemporada.
Como dato curioso, varios venezolanos aparecen en el ampliado grupo de pitchers que nunca han pisado esas etapas decisivas tras, por lo menos, 70 comienzos. Ellos son: Jhoulys Chacín, Tony Armas, Luis Leal, Víctor Zambrano y Felipe Lira.
¿Y ahora?
En este instante los objetivos de Hernández parecen estar enfocados en ganarse de nuevo su puesto como abridor, tarea que luce complicada porque con James Paxton, Mike Leak, Marco Gonzáles y Wade LeBlanc por delante no parece haber mucho espacio para él.
En segundo lugar está ayudar al equipo en esa férrea lucha que mantienen contra Astros de Houston y Atléticos de Oakland en el Oeste, pero para la cual lucen revitalizados luego de la barrida de cuatro juegos conquistada en la casa de los actuales campeones del mundo el pasado fin de semana.
“Este es el mejor equipo del cual he formado parte en muchas temporadas”, repite el venezolano con frecuencia, pero no ha dado mayores explicaciones públicas de su nuevo rol en Seattle.
En la medida que se acerca el final de la temporada regular y que se enreda la tabla de posiciones, “El Rey” debe aprovechar cualquier hendija para obtener protagonismo, sin importar que tarea le asignen. Una contribución desde el bullpen podría garantizar que clasifiquen los Marineros y ahí, aunque no sea como abridor, estaría la gran oportunidad de vivir la emoción de octubre.
“A pesar de que lo llaman “El Rey” él no trata a los demás como si lo fuera y los demás fuésemos simples plebeyos”, sentenció su colega lanzador Wade LeBlanc. Hernández alcanzó el estrellato siguiendo consejos de los, para entonces, experimentados Jaime Moyer y Eddie Guardado y si asume con humildad su realidad, tal vez, pueda justificar su permanencia en el club durante la última temporada de su pesado contrato de casi $28 millones en 2019.
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