Venezolanos no ven luz al final del tunel
Mi sobrino me escribió desde san Cristóbal » tía esto es invivible, ya no se puede decir que es racionamiento, es más el tiempo sin luz que el que tenemos con luz , lo poco que podemos comprar de carne o pollo se dañó » . Que dolor siento por sus palabras, expresa un familiar en respuesta a tan lamentables hechos.
Los venezolanos sienten que tienen cada vez más lejos la luz al final del tunel, a causa del deterioro de las empresas de producción energética en el país. Entre más fallas se registren las autoridades se encargarán de adjudicar responsabilidades a acciones contra la revolución, sin dar explicaciones concretas ni ejecutar labores para remediar el problema.
«El pueblo venezolano ha resistido valientemente a la ruín agresión de Donald Trump e Iván Duque contra nuestro pueblo, con complicidad de factores extremistas opositores. ¡Ya basta!», aseveró Delcy Rodríguez, en relación a la falla eléctrica del 5 de mayo.
Mientras tanto las historias se reseñan a diario en las redes, un familiar, un amigo, el vecino, o el hermano del vecino, o la mamá del amigo, en fin un sinnúmero de personas que se encadena para describir la fatiga de estar sin servicio eléctrico por más de 12 horas en lapsos de 6 horas a diario. En diversos puntos de Venezuela consiguen «disfrutar» de apenas dos horas de electricidad cada 6 horas, en fin «el purgatorio en tierra», desdeñan muchos.
Muchos sectores de Caracas y en el interior del país, quedan a oscuras, como sucedió el pasado 5 de mayo, y la ciudadania se da a la tarea de grabar, fotografiar y publicar en sus diversas cuentas en redes sociales el malestar por sus padecimientos.
Habitantes de los estados Zulia, Táchira, Trujillo y Lara (oeste) confirmaron un severo apagón que afectó las comunidades en que residen desde las 19.00 GMT, a pesar de sufrir fallos a diario de hasta nueve horas.
El gobernador de Mérida, el opositor Ramón Guevara, confirmó la muerte de un joven durante una protesta ciudadana que denunciaba los constantes cortes eléctricos en esa entidad del oeste.
«Expresamos nuestro dolor y solidaridad para con los familiares y amigos del joven merideño Rafael Hernández, quien murió la noche del pasado lunes (4 de mayo), cuando protestaba por los largos apagones», dijo el mandatario regional en Twitter.
Según el Gobierno venezolano, los fallos eléctricos ocurren por supuestos ataques electromagnéticos o sabotajes, pero la oposición y expertos atribuyen la situación a la falta de mantenimiento e inversión en las plantas y centrales eléctricas.
Dónde hay gasolina
En cuanto se va el servicio eléctrico se suspende el suministro de combustible y la extensa cola se paraliza ante la imposibilidad de cumplir el cometido, y es que las bombas se apagan y el malestar ennegrece el ambiente, de por sí con ánimos caldeados producto de las largas colas y la prolongada espera «por nada».
Sumado a esto aparecen en escena los revendedores ilegales de gasolina, que se aprovechan de la escasez de combustible en Venezuela para obtener ganancias.
Esta situación afecta a quienes también padecen de electricidad, y es que para encender las plantas que surten energía se requiere gasolina, sin embargo, los costos en dólares impuestos por los revendedores están ocasionando estragos en el bolsillo del venezolano.
Cuando se pregunta en las colas a los afectados, estos cuentan cómo se resuelve el llenado del tanque y es que el amigo del vecino o el allegado del prestador de servicio en la estación de combustible siempre tiene una solución.
Una cadena extensa donde entran militares, trabajadores de la industria petrolera e incluso motorizados, deben repartir las ganancias con el militar que le deja surtir, así lo comentan quienes llevan dias «haciendo una cola y aún nada».
Hay quienes se atreven a usar el wassap para ofrecer sus servicios y ubicación de entrega, desafiando toda norma.
Detrás de mi urbanización suenan pitos, cornetas y disparos. Al parecer, los vecinos detectaron a alguien. No hay electricidad y esto es terrorífico
— Lorena Evelyn Arráiz (@lorearraiz) May 12, 2020
Aunque la luz no se ve, y la gasolina tampoco, los venezolanos apuestan a un mejor camino, donde también se involucran el agua, el gas y todo aquel servicio adecuado para un mejor estilo de vida, reflexiona una mayoría optimista.