El acceso a una vacuna ha cobrado mayor importancia a medida que la enfermedad golpea con más fuerza el continente americano (incluida Norteamérica), que sumó casi 5 millones de nuevos casos (según cifras recogidas por la Universidad Johns Hopkins) solo en la última semana, destacó en la rueda de prensa la directora de la OPS.

“Solo en la última semana, ha habido casi 5 millones de nuevos casos de COVID-19 de los que se ha informado, la mayoría en Norteamérica, donde Canadá y EE. UU. siguen siendo los productores principales de nuevos casos”, alertó Etienne.

En particular, la directora de la OPS recordó que, en Canadá, un aumento de las hospitalizaciones está poniendo en jaque la capacidad de los centros sanitarios de las regiones del centro del país; mientras que EE. UU. ya ha superado la barrera de las 300.000 muertes, una cifra que, en su opinión, “subraya el costo humano de esta crisis”.

Etienne expresó especial preocupación por el aumento de casos en Panamá, Brasil, Colombia y Belice, país este último donde los hospitales están el límite de su capacidad.

Frente a ello, Honduras, El Salvador, Guatemala y Nicaragua están reportando casos muy bajos de COVID-19; pero Etienne pidió interpretar esas cifras con “precaución”, ya que los huracanes Eta e Iota han impactado en la capacidad de los Gobiernos de monitorear esa situación y parte de la población se ha visto forzada a desplazarse.