PHOTO/AFP/OMAR HAJ KADOUR – Imagen de devastación por el terremoto que afectó a Turquía y Siria
La frontera entre Turquía y Siria ha sufrido a primera hora del lunes un brutal terremoto de 7,8 grados en la escala Richter que ha dejado más de 2.300 muertos y más de 8.000 heridos, además de una fuerte devastación en la zona, como confirmaron autoridades turcas y sirias.
Unos 1.700 edificios colapsaron en territorio turco por el movimiento telúrico en una franja comprendida entre las ciudades sirias de Alepo y Hama y el enclave turco de Diyarbakir, más de 330 kilómetros al noreste, como confirmó Fuat Oktay, vicepresidente de Turquía.
El sismo de magnitud 7,8 ocurrió poco después de las 4 de la mañana hora local del lunes, a 23 kilómetros al este de Nurdagi, provincia de Gaziantep, al sureste del territorio turco a una profundidad de 24,1 kilómetros, según datos del Servicio Geológico de Estados Unidos, a 90 kilómetros de la frontera con Siria.
Además de los más de 2.300 fallecidos y más de 8.000 heridos entre ambos países, según han confirmado autoridades como Recep Tayyip Erdogan, presidente de Turquía, se estima que hay también miles de desaparecidos por este demoledor terremoto. Ante la situación generada, Ankara ha anunciado la creación de un puente aéreo para enviar ayuda humanitaria a la zona afectada. Por su parte, los Cascos Blancos declararon el estado de emergencia en la zona afectada de Siria por este seísmo, el más fuerte registrado en territorio sirio en más de tres décadas.