El empleo y la inflación de Estados Unidos están en un momento «positivo» y las recientes rebajas de las tasas de interés ayudan a la economía, dijo este martes el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell.
Jerome Powell,presidente de la Reserva Federal (Fed)
Fuente: https://www.france24.com
A tres semanas de una nueva reunión de la Fed, Powell reiteró que la política monetaria «no está predeterminada» pero la entidad «vigila de cerca» los indicadores y los riesgos económicos.
Tras dos modestos recortes de tasas en marzo y julio, la mayoría de los agentes financieros esperan otra rebaja de un cuarto de punto porcentual en la próxima reunión de política monetaria que la Fed abrirá el 30 de octubre.
En un discurso pronunciado en Denver, Powell se mostró prudente. «La próxima reunión es en unas semanas y hasta entonces vigilaremos de cerca las informaciones económicas».
«En una reunión tras otra, estaremos pendientes de los datos, evaluando perspectivas y riesgos», se limitó a decir.
Powell pareció más optimista sobre la inflación cuya apatía ha sido hasta el momento una de las causas de la reducción de las tasas.
«La inflación está algo por debajo de nuestro objetivo simétrico de 2% pero progresivamente se ha reafirmado en los últimos meses», subrayó.
Insistió que los miembros de la Fed seguirán proyectando «una expansión duradera de la actividad económica, un mercado de trabajo dinámico y una inflación cercana al objetivo».
«Muchos de quienes hacen previsiones fuera de la Fed están de acuerdo con eso», afirmó en respuesta a quienes temen una recesión como la que ya sufre el sector manufacturero.
En su discurso, Powell mencionó las tensiones en las tasas interbancarias de muy corto plazo (repo) y anunció que la Fed considera comprar bonos del Tesoro para fortalecer sus reservas.
No obstante esas compras de activos no tienen nada que ver con la política seguida tras la crisis de 2008 cuando la Fed salió a comprar masivamente bonos del Tesoro para sostener la economía, dijo Powell.
Esas nuevas compras de no bonos «no deberían tener efectos sobre nuestra política monetaria», estimó.