El secretario del Tesoro de Estados Unidos descartó con firmeza el lunes la posibilidad de una recesión y afirmó que la guerra comercial que Donald Trump lidera contra China «no tuvo ningún impacto en este momento» en la economía estadounidense.
El secretario del Tesoro de EEUU, Steven Mnuchin (izq), responde las preguntas de los periodistas el 9 de septiembre de 2019 en la Casa Blanca, en Washington. (afp_tickers)
Fuente: https://www.swissinfo.ch
«No veo de ninguna manera una recesión», dijo Steven Mnuchin en Fox Business, señalando que el crecimiento de Estados Unidos estaba muy por delante de otras economías avanzadas, mientras que la desaceleración de la expansión global tuvo «un impacto moderado en la economía estadounidense».
Según Mnuchin, la guerra arancelaria entre Washington y Pekín solo afecta a la economía china. «Por el momento, no vemos signos de impacto en Estados Unidos», dijo.
«Está claro que hay una desaceleración considerable de la economía mundial tanto en China como en Europa, pero continuamos siendo un punto luminoso», aseguró.
Se estima que la expansión de la primera economía mundial llegue al 2% en el segundo trimestre, por debajo del 3,1 en el primer trimestre.
Sobre las negociaciones con China para poner fin a una guerra comercial que persiste hace 18 meses, Steven Mnuchin enfatizó una vez más que la administración Trump firmará un acuerdo solo si el presidente, que busca un segundo mandato en 2020, lo considera satisfactorio.
«Tenemos un documento, hemos progresado mucho, ellos vienen aquí. Considero que esto es un signo de buena fe, que quieren continuar negociando y estamos listos para negociar», dijo el secretario. Se espera que una delegación china, encabezada por el viceprimer ministro Liu He, llegue a Washington a principios de octubre.
«Si podemos lograr un buen acuerdo, un acuerdo que sea bueno para nosotros, lo firmaremos o el presidente estará perfectamente feliz de perseguir los aranceles, mientras recaudamos sumas significativas», dijo.
Washington y Pekín estuvieron a punto de firmar un acuerdo comercial a principios de mayo, cuando las conversaciones se estancaron.
Desde entonces, las tensiones se han intensificado con la entrada en vigor de aranceles reforzados. La más reciente alza se aplicó desde el 1 de septiembre.
A fines de año, Donald Trump planea recargar casi todas las importaciones procedentes de China (unos 540.000 millones de dólares basados en las importaciones de 2018).
Los economistas advierten sobre la guerra comercial que frena el crecimiento global.