Un nuevo proyecto de ley apoyado por la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés) y aprobado por la Legislatura de Texas permitirá que cualquier residente que pueda poseer legalmente un arma de fuego pueda portarla en forma abierta u oculta durante una semana después de un desastre natural
Una persona revisa una pistola semiautomática descargada durante una clase para obtener el permiso de Utah de portación de un arma oculta en Range Master de Utah, el 9 de enero de 2016 en Springville, Utah. FOTO: GEORGE FREY/GETTY IMAGES
Actualmente, para portar un arma de fuego fuera de su casa, los texanos deben tener una licencia de portación, lo cual exige el pago de una cuota, además de tomar un curso y aprobar un examen de tiro y una revisión de antecedentes. Sin embargo, si el gobernador republicano Greg Abbott aprueba este reciente proyecto de ley, nada de lo anterior se requerirá después de una inundación u otro desastre natural.
La senadora estatal republicana Joan Huffman, una de los tres republicanos que votaron contra el proyecto de ley, criticó la nueva legislación en una conversación con Dallas News. “Se trata realmente de una política pública muy deficiente que no ha sido bien pensada”, dijo Huffman. “No resuelve ningún problema.
Al contrario, está creando un problema”. Lee: Suicidios de Parkland y Sandy Hook: Los escaneos cerebrales en la detección de ideaciones y riesgo de suicidio La idea del proyecto de ley surgió de algunos propietarios de armas de Texas que solicitaron relajar las regulaciones después del paso del huracán Harvey en 2017.
La NRA apoyó y amplificó esos llamados y, finalmente, ayudó a apoyar una legislación que hiciera justamente eso. La NRA afirma que el proyecto de ley es necesario para evitar el saqueo de propiedades tras el paso de huracanes y otros desastres naturales. Sin embargo, las historias de saqueos suelen ser exageradas tras el paso de los huracanes, y con frecuencia se relacionan con ideas equivocadas sobre la raza y la clase social.
“No hay ninguna duda de que, en un día cualquiera, hay personas que robarán las cosas de otras personas”, declaró a The Chicago Tribune tras el paso del huracán Harvey el teniente general jubilado Russel Honore, quien contribuyó a supervisar la respuesta militar al huracán Katrina.
“Sin embargo, lo que vemos después de esas tormentas es una preocupación excesivamente exagerada”. Honore añadió que “hay un prejuicio en juego. Las personas piensan que si eres pobre o negro, siempre tratas de robar algo, y esas advertencias sobre los saqueos validan los estereotipos que tienen las personas sobre los pobres”.
Art Acevedo, el jefe de la policía de Houston, instó al gobernador Abbott a vetar el proyecto de ley en un tuit publicado este lunes. “Sufrimos uno de los peores desastres en la historia de Texas con el paso del huracán Harvey.
El mundo observó cómo nos uníamos”, escribió. “Este proyecto de ley no fue necesario entonces ni es necesario ahora. Esto envalentonará a los más de 20,000 miembros de pandillas y no contribuirá a la aplicación de la ley. Esperemos que no sea aprobado”.
La semana pasada, la Cámara de Texas voto para terminar con la prohibición de portar armas en lugares de culto y para aumentar el número máximo de empleados escolares que pueden portar armas de fuego en los campus. Sin embargo, los legisladores de Texas incorporaron un millón de dólares en el presupuesto de gastos para impulsar una campaña de almacenamiento seguro de armas de fuego.
La NRA se opone al programa y actualmente, la decisión sobre el futuro de la legislación depende de nueva cuenta del gobernador Abbott.