En los últimos cinco años, un total de 36 religiosas latinoamericanos transformaron la realidad de 12 zonas pobres en Estados Unidos, sirviendo a los hispanos más necesitados que viven en el país.
Las religiosas que hacen parte del proyecto. Foto: Catholic Extension
Fuente: https://www.aciprensa.com
Gracias a un programa creado por Catholic Extension y la fundación Conrad N. Hilton, 36 religiosas de 12 congregaciones y 6 países latinos llegaron a Estados Unidos en 2014, donde recibieron formación en cultura estadounidense, teología y espiritualidad en el Catholic College de San Antonio (Texas) para servir luego en distintas zonas donde viven los hispanos más necesitados.
Una hermana evangeliza puerta a puerta en Perris, California. Foto: Catholic Extension
La hermana Erika Cedrone, directora de misión de Catholic Extension, dijo a EWTN Noticias que el proyecto surgió porque “siempre hubo una necesidad en la Iglesia Católica de conectarse con las comunidades hispanas aquí en los Estados Unidos” por lo que se estableció “este programa que invita a las hermanas a servir en ministerios pastorales en las diócesis más necesitadas”.
“Las hermanas han impactado a más de 100 mil personas sin mencionar a muchos otros que han cambiado para siempre sus vidas”, destacó la religiosa.
Dos hermanas sirven en un comedor en Kalamazoo, Michigan. Foto: Catholic Extension
De otro lado, la hermana Rosa Arreola, de la congregación Hijas de María Inmaculada de Guadalupe (México), dijo a EWTN Noticias que “uno de los logros principales es que hemos alcanzado a las poblaciones hispanas, los hemos acercado a la Iglesia, hemos despertado en los jóvenes el deseo de consagrar su vida al Señor con las vocaciones”.
“Nosotras como hermanas hemos crecido, nos hemos formado, hemos estudiado. Doce de nosotras vamos a terminar una maestría en liderazgo en el Boston College y nuestras congregaciones también se han beneficiado con este intercambio”, resaltó la hermana Arreola.
Una religiosa enseña a leer a hijos de inmigrantes. Foto: Catholic Extension
Para llevar a cabo el programa, en el que las 36 hermanas se dividieron en 12 grupos de a 3 cada uno, primero llegaron al lugar donde iban a servir, a las parroquias específicas y luego elaboraron un proyecto que respondiera a las necesidades específicas. Las religiosas también han trabajado estrechamente con los obispos que han seguido de cerca el avance de su ministerio pastoral con los hispanos.
Sobre los lugares donde sirven actualmente, la hermana Arreola dijo que “estamos en las diócesis más al norte de los Estados Unidos y también en la frontera, cerca de México. En realidad estamos en todas partes, con nieve, con sol, ahí trabajamos con la gente”.
Una hermana evangeliza a niños. Foto: Catholic Extension
Los lugares y los proyectos realizados por estas religiosas son muy variados. Por ejemplo, las hermanas Yelitza Ayala Gilot, María del Mar Marchán e Irene Santiago de las Hermanas Dominicas de Nuestra Señora del Rosario de Fátima de Puerto Rico, coordinan la catequesis, las lecciones de Biblia y lideran un coro de jóvenes.
Las hermanas Lourdes, Luz, María Eva y Rosario lograron reunir entre 20 y 40 laicos cada semana para evangelizar puerta a puerta en la localidad de Perris en California.
Las hermanas en su formación para el proyecto. Foto: Catholic Extension
De otro lado las religiosas Maryud Cortés, Yuliana Rúa y Dora Orozco organizaron un comedor en Kalamazoo, Michigan, con el que alimentan a la comunidad y obtienen fondos para la parroquia local y el ministerio para las granjas locales.
Por su parte, las hermanas Isabel Donate Valdez e Irma Lerma Cantor visitan a migrantes en la diócesis de Yakima en Washington. Enseñan a leer a los hijos de esta comunidad.
Las hermanas en Nueva York. Foto: Catholic Extension
Las hermanas Brenda Hernández Valdés, Azucena del Carmen González Loyo y Rosa Anabeli Arreola Moreno evangelizan a la comunidad hispana en Bismark en Dakota del Norte. Con su labor han cuadruplicado la asistencia a Misa.
La hermana Rosa Arreola también dejó un mensaje para quienes desean servir a los más necesitados: “No tengamos miedo de entregar nuestras vidas al servicio de los más necesitados” y pidió “que nos apoyen con sus oraciones y de la manera que puedan para que sigamos extendiendo el Reino de Dios allí donde seamos enviadas”.
Las hermanas en Nueva York. Foto: Catholic Extension
De otro lado la hermana Erika Cedrone explicó que en el mes de julio este grupo de 36 hermanas concluye su labor pero dan la bienvenida a un grupo nuevo de 30 hermanas de distintos países como México, Colombia, El Salvador, Guatemala y Honduras.
“Recibimos a 30 hermanas nuevas y ellas van a estar en 10 diócesis nuevas, en áreas de misión. Estas hermanas construirán puentes entre las diócesis y las comunidades hispanas”, indicó.
Las religiiosas también juegan basket. Foto: Catholic Extension
Tras señalar que “nuestro sueño es continuar este modelo nacional y dar la bienvenida a más hermanas” la religiosa explicó que es importante “seguir creciendo y nutriendo a la Iglesia Católica e hispana en todo el país”.
“La Iglesia busca siempre responder a las necesidades de la gente, especialmente en la frontera. Allí hay algunas de nuestras hermanas y laicos voluntarios para dar apoyo y para renovar la fe”, concluyó.
Para colaborar con el apostolado de estas religiosas, puede ingresar AQUÍ