Texas no es el único estado que quiere poner más armas en escuelas. Los legisladores de Florida aprobaron aumentar el número de maestros armados, en respuesta a la masacre ocurrida en febrero de 2018.
Bandera del estado de Texas | ESPECIAL
Fuente: https://www.multimedios.com
Casi un año después de la matanza en una escuela secundaria de Texas en la que murieron ocho estudiantes y dos docentes, la legislatura del estado están cerca de aprobar iniciativas para añadir más guardias armados en las escuelas, actualizar los planes de seguridad y otorgar ayuda psicológica a los estudiantes.
Hay escasa probabilidad de que se aprueben medidas como restringir la venta de armas o supervisar mejor el acceso a ellas, en un estado donde los líderes republicanos defienden el derecho constitucional a la tenencia de armas. Texas permite la portación de pistolas con licencia, e incluso de armas largas como fusiles de asalto.
«En Texas podemos hacer que las escuelas sean un blanco más difícil para alguien que tenga intenciones violentas y podemos detectar anticipadamente a estas personas, pero el gobierno no quiere ni tocar las propias armas», afirmó Cal Jillson, profesor de ciencias políticas de la Southern Methodist University. «Es parte de la historia del estado, esa es su imagen, como la del ‘cowboy'».
Texas no es el único estado que quiere poner más armas en escuelas. Los legisladores de Florida aprobaron aumentar el número de maestros armados, en respuesta a la masacre ocurrida en febrero de 2018 en la escuela secundaria Marjory Stoneman en Parkland, que dejó 17 muertos.
Los cambios en Texas incluyen varias medidas propuestas por el gobernador Greg Abbott poco después de la matanza en mayo de 2018 en la escuela secundaria Santa Fe cerca de Houston. La actual sesión legislativa es la primera desde ese acontecimiento y Abbott ha hecho que la seguridad escolar es una de sus prioridades. La sesión concluye el 27 de mayo.
«Ningún estudiante debe tener miedo de ir a su escuela… Ningún padre debe sentir temor al dejar a su hijo en la escuela», declaró el gobernador.
Hasta ahora, el Senado estatal ha aprobado 100 millones de dólares para medidas de seguridad que traten de «blindar» a las escuelas, como la colocación de detectores de metal, barreras contra vehículos, puertas reforzadas, sistemas de alarma y otras medidas. La cifra es mucho menos que los 400 millones de dólares que Florida aprobó para seguridad escolar en 2018.