El gobierno de México reconoció que enfrenta un flujo migratorio «inusual» de personas que buscan entrar al país por su frontera sur hacia Estados Unidos.
En conferencia de prensa,, dijo que en los primeros tres meses del año entraron a México unos 300.000 migrantes.
Fuente: http://spanish.xinhuanet.com
«El número de nacionales hondureños que han abandonado su país con destino a Estados Unidos, pasando por México, aumentó de manera inusual, al tiempo que, dentro de ese flujo, creció también de manera inédita la proporción de mujeres y menores de edad», señaló.
«Estamos haciendo todo lo que está en nuestras manos para brindarles la atención necesaria, pedimos que ellos contribuyan con el respeto a nuestras leyes y autoridades y a aceptar su registro como precondición para decidir su calidad migratoria en el país», expuso Sánchez Cordero.
Acompañada por el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, y el titular del Instituto Nacional de Migración, Tonatiuh Guillén, la secretaria recordó que México trabaja bajo tres ejes fundamentales en política migratoria: la protección de los derechos humanos, el impulso al desarrollo económico y social de Centroamérica, y el registro ordenado de las personas migrantes.
Cientos de migrantes centroamericanos han sido detenidos los últimos días en el sureño estado de Chiapas por agentes migratorios en medio de un operativo para impedir que continuaran su viaje a Estados Unidos.
Al respecto, Guillén explicó que las personas detenidas, entre las que habían mujeres y niños, se hizo en Pijijiapan, Chiapas, en el marco de una operación de gran escala, ya que hubo un grupo de migrantes que agredió con piedras a la autoridad, por lo que se pidió ayuda a la Policía Federal.
Ahora, la cancillería mexicana colabora para facilitar el regreso y readmisión en condiciones de seguridad para los migrantes, detalló el consultor jurídico adjunto de cancillería mexicana, Alejandro Celorio.
En tanto, el canciller Ebrard aseguró que en ningún momento va a cambiar la política.
Adelantó que viajará el 7 de mayo a Washington, Estados Unidos, para abordar con autoridades de ese país temas como la migración.
«Uno de los motivos principales de la visita es compartir lo que puede ser el trazo de cómo mejorar la relación México-Estados Unidos», dijo.