Una vez en el legislativo, el proceso de votación tomará 90 días, pero para iniciarlo se debe contar además con el aval de Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes.
Según la legislación estadounidense, el proceso de votación debe durar un máximo de 90 días, pero para iniciarlo se debe contar además con el aval de Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes (la cámara de origen).
El representante texano Will Hurd, quien participó el martes —junto con otros 22 miembros de la cámara— en una reunión con Trump en la Casa Blanca, destacó que el presidente pondrá el T-MEC a consideración del Congreso en mayo.
El mismo martes, en una reunión con senadores republicanos en el Capitolio, Trump dijo que planea presentar el T-MEC para su votación lo antes posible de conformidad con los procedimientos legislativos establecidos, lo que implica que sería después de que la Comisión de Comercio Internacional presente su análisis del impacto económico del acuerdo, el 19 de abril. Trump ha identificado al T-MEC como su principal prioridad legislativa este año, de acuerdo con el medio estadounidense Politico.
Previamente, el lunes, en la Convención de la Cámara Americana de Comercio (AmCham México), Luz María de la Mora, subsecretaria de Comercio Exterior de la Secretaría de Economía, recordó que Trump presentó la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) como una oferta de su campaña, cambiándolo luego, desde la perspectiva de él, de “un desastre” al “mejor acuerdo que nunca se haya negociado”.
“Para él (Trump) es una victoria política haber concluido ese acuerdo y va a ser una victoria política poder tenerlo aprobado y en vigor, y le va a servir para su reelección”, opinó De la Mora.
Una vez que comience el proceso de consideración e implementación del T-MEC en el Congreso estadounidense, el Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara de Representantes tiene 45 días para presentar la iniciativa y 15 días después esa cámara debe hacer la votación.
Posteriormente, el Comité de Finanzas del Senado debe presentar la iniciativa en 15 días y los senadores realizar la votación pasados otros 15 días. Estados Unidos y México tienen una sólida relación económica y comercial que se ha reforzado en los últimos años a través del TLCAN. Desde 1994, este tratado eliminó prácticamente todas las barreras comerciales y no arancelarias y de inversión entre los países socios y proporcionó un mecanismo basado en normas para regular el comercio de América del Norte.
“En el partido demócrata hay de todo, pero me parece que hay una evaluación de que la relación comercial con México es importante y que este acuerdo (el T-MEC) es importante. Creo que este debate en Estados Unidos ayudó a replantear lo que significa el tener un acuerdo como el que se tiene con México y a replantear la relación económica, comercial y de integración con México”, dijo De la Mora.
En noviembre pasado, Ildefonso Guajardo, entonces secretario de Economía de México, expuso que la negociación del T-MEC se cerró considerando en su balance la probabilidad de que se votara con un Congreso estadounidense de mayoría demócrata.
“Me parece que después de toda esta discusión, todo este debate y todos los ataques a México por el TLCAN, al final salimos muy bien librados”, concluyó De la Mora.