Más de 2,7 millones de personas están convocadas a las urnas el próximo 5 de mayo para elegir, entre otros, al presidente y vicepresidente de Panamá y los 71 diputados a la Asamblea Nacional.
Fuente: http://www.telemetro.com
Panamá se sumerge en una inédita campaña caracterizada por estrictas medidas para el control del gasto y en las que el grado de clientelismo, reformas constitucionales, independencia y la relación con China aparecen como algunas de las claves políticas que los panameños deben observar durante su desarrollo.
Compiten por la Presidencia Laurentino «Nito» Cortizo del Partido Revolucionario Democrático (PRD); Rómulo Roux del Cambio Democrático (CD); Saúl Méndez del Frente Amplio por la Democracia (FAD); José I. Blandón del Partido Panameñista, y por libre postulación Ana Matilde Gómez, Ricardo Lombana y Marco Ameglio.
A continuación algunas de las claves políticas de este proceso:
1. El grado de clientelismo
Tu voto por una lámina de zinc o cemento, es el típico clientelismo panameño y esconde las ansias de reelección de un sinnúmero de candidatos a diputados y autoridades locales, contra lo que se ha levantado la campaña cívica «#NoALaReelección», sobre todo en redes sociales y dirigido al 30 % de nuevos votantes menores de 35 años, que pueden determinar un triunfo.
2. Las reformas constitucionales
Los analistas y politólogos coinciden con todos los candidatos en que impulsar reformas constitucionales profundas es un tema ineludible de la campaña y del paquete electoral, si se quiere renovar la institucionalidad afectada por la crisis de corrupción de la última década. En lo que no hay consenso todavía es en el método para esos cambios, que se pueden acometer mediante una Constituyente Paralela prevista en la Carta Magna y que no altera los mandatos de las autoridades que sean electos el 5 de mayo, o de una Asamblea Constituyente originaria que no está contemplada en las leyes.
3. La independencia de los candidatos
La ola de candidatos por la libre postulación, más de mil en este proceso electoral, cuestiona la autenticidad de esa figura pues muchos han salido de los partidos tradicionales a buscar firmas como «independientes» amparados en la reglamentación actual. Aparte, los analistas recomiendan indagar los antecedentes de los candidatos en un país «donde todos se conocen o son familia» y considerar la labor de investigación que divulgan novedosas aplicaciones a través de varias redes sociales, en un intento por concienciar y levantar el entusiasmo entre los más jóvenes votantes, hasta ahora considerados indiferentes al sufragio, hartos de la corrupción pública e impunidad que se percibe les garantiza el sistema judicial.
4. La relación con el gigante China
Cómo reactivar la economía, en ralentización en el último lustro por factores externos como la ola de proteccionismo, e internos, como el exceso de judicialización y lentitud de la administración pública, pasa por desarrollar la oportunidad que abre un eventual tratado de libre comercio con China, que ve a Panamá como un trampolín para proyectarse en Centroamérica y el Caribe, además de pugnar por ganar importantes licitaciones futuras como la tercera línea del metro de Panamá o la expansión portuaria en el Canal de Panamá.
5. La reforma de la Seguridad Social panameña
El alto costo político de una reforma profunda a la Seguridad Social panameña mete miedo a cualquier candidato presidencial, lo mismo que el asegurar el abastecimiento de agua para la población y el Canal de Panamá, o el «revolcón» al sistema educativo, por ser asuntos de impacto directo para la mayoría de los cuatro millones de panameños. Los analistas consultados advierten que el suprapresidencialismo reinante en Panamá es el primer talón de Aquiles que tiene que reformarse para poder hacer los cambios a sistemas cuyos grupos de interés se resisten a aceptar. Subir la edad de jubilación y el porcentaje de contribuciones económicas es la «papa caliente» que hasta ahora ningún candidato ha abordado.