Proyecto Open inició con el trabajo de instalación de oficinas, en estas se pretende colocar el conjunto de medios comunicacionales en la que los comunicadores exiliados podrán aplicar.
Fuente: https://www.elnuevodiario.com.ni / Ana Cruz
Los periodistas independientes que se han visto obligados a exiliarse en Costa Rica, tras las persecuciones, asedios y amenazas que han recibido de parte del Gobierno de Nicaragua y de sus simpatizantes, se están organizando para poner en el país vecino su propio medio de comunicación.
Noel Marenco, exreportero del recién clausurado Canal 100% Noticias, junto a un grupo de jóvenes ha empezado la creación de la organización sin fines de lucro Proyecto Open, misma que propone la instauración de varias plataformas comunicacionales independientes, tales como; un canal de YouTube, una plataforma web y una radio en línea.
Por ahora, Proyecto Open inició con el trabajo de instalación de oficinas, en estas se pretende colocar el conjunto de medios comunicacionales en la que los comunicadores exiliados podrán aplicar.
“Intentaremos integrar a muchos de los periodistas que se están refugiando aquí en Costa Rica. Será la nueva sala de redacción y prensa, donde habrá un espacio para los periodistas que hemos sido exiliados, donde podremos hacer prensa libre e independiente”, aseguró Marenco.
Trabajo para exiliados
Marenco, graduado en diplomacia y relaciones internacionales, explicó que en los próximos días recibirá la personería jurídica de Proyecto Open, la cual le permitirá arrancar el proyecto con una convocatoria a los periodistas exiliados.
“Como es un proyecto social, inicialmente, vamos a trabajar con una colaboración. Tenemos un programa en el que estipulamos que de uno a dos meses será una colaboración para que el proyecto pueda arrancar y tener alguna sostenibilidad, por supuesto que, se contempla que la persona tenga una ayuda para sus gastos en algo en extra”, explicó el excolaborador de 100% Noticias.
Plan autosostenible
El Proyecto Open arrancará con un fondo de un poco más de 10 mil dólares, para el montaje de oficina y los proyectos comunicacionales, dinero que Marenco especificó fueron recaudados en campañas de Go-Found Me (Ve y finánciame), realizadas en Costa Rica y Estados Unidos, donde personas naturales apoyaron económicamente para que se diera forma a este proyecto social autosostenible.
“La Organización surge porque nos dimos cuenta que lo que necesitábamos los exiliados nicaragüenses era un espacio que nos permitiera la autosostenibilidad de nuestros proyectos, para que pudiéramos valernos por sí mismos”, señaló Marenco.
Las aspiraciones de Proyecto Open es que en sus instalaciones se encuentre una oficina de prensa y divulgación, auditorio, centro de acopio, cafetín y una sala de juntas.
Centro de acopio
En el centro de acopio, los miembros de la organización podrán recaudar alimentos, ropa, zapatos y ayuda económica que se haga llegar para los nicaragüenses refugiados.
En este lugar también podrán acercarse los nicas que busquen asesoría legal o algún apoyo material, pues en las mismas oficinas también podrán adquirir la ayuda que reciba la organización.
Espacio de movimientos sociales
Asimismo, contemplan la inclusión de un espacio en el que los movimientos sociales, articulaciones y líderes tengan donde reunirse y trabajar sus proyectos.
Proyecto Open pretende mantenerse sostenible con los ingresos que generen el alquiler de sus auditorios o la publicidad que consigan los espacios comunicacionales, ofreciendo precios accesibles en renta de auditorios para los movimientos sociales nicaragüenses que buscan capacitarse en Costa Rica.
En los últimos ocho meses de protestas sociales antigubernamentales, la Fundación Violeta Barrios de Chamorro ha registrado más 400 ataques a la libertad de expresión, lo cual se ha traducido en medios clausurados, allanados, periodistas criminalizados y docenas de comunicadores que se han ido al exilio por temor a perder la vida en su labor periodística.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) denunció en su último informe, presentado ante el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), que en 42 días, de octubre a diciembre, registraron 117 ataques a la libertad de expresión contra medios de comunicación críticos del Gobierno de Daniel Ortega.