Una experiencia agrocomercial de Honduras ha inspirado a Nicaragua y Guatemala a retomarla por los buenos resultados, informó hoy la organización internacional no gubernamental (ONG) Rikolto, que impulsa programas en catorce países a través de ocho oficinas regionales.
Se trata de una dinámica comercial favorable mejorando la oferta de productos y poder de negociación, impulsada por el Consorcio Agrocomercial de Honduras, que está conformado por ocho organizaciones productoras de hortalizas que compartieron su actividad con productores de Guatemala y Nicaragua.
En un comunicado, Rikolto indicó que el consorcio fue el anfitrión de la jornada «Gestión del conocimiento para la producción sostenible de hortalizas», que se celebró en Honduras del 8 al 11 de octubre con 40 participantes, en un intercambio de conocimientos y experiencias.
El evento convocó a representantes de universidades, cooperativas de pequeños agricultores de vegetales, empresas comercializadoras y de ventas de insumos para la agricultura de Nicaragua, Honduras y Guatemala, añade la nota de prensa.
«Mi papá solía cultivar y me decía que yo no lograría ser productor, ahora llevo 11 años cultivando, empecé con 13 parcelas de 25 metros cada una y ahora siembro hasta 10 manzanas (unas siete hectáreas) de diferentes hortalizas por año», dijo Miguel García, agricultor de la Cooperativa Productora de Hortalizas en Nicaragua.
García subrayó que para él «es un sueño hecho realidad» y que «la ciencia del agricultor es sentir pasión por lo que haces, por aprender y estar a la par de la tecnología».
Él es uno de los 40 participantes en el intercambio de conocimientos y experiencias celebrado en Honduras, que fue el tercero organizado por el proyecto que surgió del interés de Rikolto, junto a la provincia occidental de Flandes de Bélgica.
El intercambio está dirigido a mejorar la rentabilidad de las organizaciones de agricultores de pequeña escala y con ello mejorar los medios de vida de sus familias, señaló Rikolto.
Las cooperativas de hortalizas en Centroamérica enfrentan desafíos en común como el limitado, o a veces nulo acceso, a servicios de investigación, de mejora de sus capacidades productivas y de comercialización, a créditos para compra de insumos y tecnología, y de estrategias nacionales y regionales que alineen estos factores para lograr un sector sostenible.
A través del programa, Rikolto facilita procesos de acceso y generación de conocimientos e intercambios de experiencias entre las organizaciones de agricultores, con centros de investigación y empresas privadas para encontrar soluciones juntos en temas como asociación, comercialización, producción sostenible e innovación tecnológica, entre otros.
«Hemos aprendido que la mejor manera de aprender entre los productores es el intercambio de ideas, ver prácticas, reflexionar y hacer experimentos en función de una mejor rentabilidad y mejores procesos de producción sostenible», dijo el responsable de Cooperación Sur-Sur de Rikolto, Roos Peirsegaele.
Agregó que «por eso son importantes estos procesos multiactores con participación de la academia, del sector privado y en caso de que sea posible también el sector público».
«Solamente juntos podemos mejorar el sector en general y la vida de los productores», enfatizó Peirsegaele.
El coordinador del programa de parte de Rikolto, Guillermo Gutiérrez, expresó que «no estamos buscando que las cooperativas de Nicaragua copien lo que se hace en Guatemala en cuanto a sistemas de riego, o cuidado de los suelos».
«En Rikolto creemos que se pueden crear nuevos modelos, tecnologías, prácticas, e incluso acuerdos comerciales gracias a esta interacción», añadió.
De parte de la región occidental de Flandes en Bélgica, el programa cuenta con aliados en investigación, procesamiento de alimentos, producción y comercialización, quienes también apoyaron el contenido y fondos de la acción, indicó Rikolto. ACAN-EFE