El Madrid de Florentino reafirma su política de austeridad económica Por: Marco Gámez
El Madrid de Florentino reafirma su política de austeridad económica
Foto: Cortesía @deportivistamx
Por: Marco Gámez
Los fanáticos del Real Madrid despiertan a diario con la esperanza de que su equipo haya concretado un fichaje estelar para tener esperanzas de conquistar algún trofeo en los venideros meses y compensar la salida de Cristiano Ronaldo y hasta la de Zinedine Zidane en un lapso muy corto.
“Ya llegaron nuestros fichajes. Aquí están: Ramos, Carvajal, Casemiro, Asensio, Isco, en fin… todos nuestros representantes en el Mundial”, repite como muñeco de ventrílocuo el DT Julen Lopetegui. Siguiendo las reglas del jerarca Florentino Pérez.
“No necesitamos que llegue nadie más, pero tampoco debemos perder a ningún integrante de la plantilla actual, con esta podemos ser competitivos”, declaró en Miami el estratega que tiene como mejor registro al frente de un equipo su actuación con el Porto de Portugal.
Precisamente, el sur de Florida es el arranque de 10 meses que pueden convertirse en un calvario para los seguidores de la escuadra blanca que de no haber sido por el penalti de último minuto en el partido de vuelta ante la Juventus, en cuartos de final de la Champions League, hubiese vivido su peor temporada en mucho tiempo.
El Madrid apenas anotó 82 goles en La Liga 2017/18, su cifra más baja desde la edición 2006/07 y apenas sumó 71 puntos, la peor cantidad desde la 2005/06. Su tercer lugar iguala la posición ocupada tras el certamen 2013/14, precisamente tras el cual se produjo la última gran explosión de fichajes para reforzar el material humano que hace vida en el Santiago Bernabeu.
Encabezados por James Rodríguez, quien costó 76 millones de euros, llegaron, Toni Kroos (25), Lucas Silva (14) y la verdadera ganga de Keylor Navas por apenas 10 millones de euros. En ese verano la contabilidad del Real Madrid acusó haber perdido entre altas y bajas 12 millones después de invertir 128 en adquisiciones.
En 2015 desembolsaron 83 millones, pero apenas recibieron 15 millones por lo que el balance en rojo fue de 68 millones de euros con el arribo de Mateo Kovacic y Danilo a la capital española.
2016 ya marcó el regreso de los números en negro para la contabilidad merengue. Se deshicieron de 34 millones y apenas invirtieron 30 millones de euros para recuperar a Alvaro Morata. Comenzaba, firmemente, en el centenario club la nueva era de ahorrar en fichajes.
Hace 12 meses hubo renovación colectiva de contratos que obligó, a pesar de haber conquistado la segunda Champions League al hilo, a desprenderse de talento futbolístico que permitió ingresar a las arcas 141 millones. Apenas usaron 41 para traer, básicamente, a Theo Hernández y Dani Ceballos. Florentino logró acumular 100 millones.
Como era de esperarse, en ese nivel de fútbol, tal ahorro en euros se tradujo en el desgaste de una plantilla que ya acusaba la erosión a causa de la edad, de sistemas defensivos que no encajaban con las características de los hombres en cancha y de alineaciones desconcertantes. Sin olvidar que en determinado momento tuvo cuatro frentes distintos: Liga, Copa del Rey, Champions League y Mundial de Clubes.
Por supuesto, un torneo de consistencia de agosto a mayo como La Liga dejó en evidencia que este grupo no da para mucho más en ese tipo de eventos, pero que las individualidades sí podían lograr la hazaña de una tercera “Orejona” y así se enfocaron luego de una serie épica frente al incoloro millonario Paris Saint Germain.
En la actualidad, el Real Madrid tiene un superávit de 26 millones tras la salida de CR7 por 100 millones de euros y los fichajes de Vinicius por 45 millones de euros y de Alvaro Odriozola, para competir por la posición de lateral derecho con Dani Carvajal, por 30 millones. El primero tiene 22 años y el segundo 26.
Todos los días sale un cuento distinto. Que Hazard quiere venir, que Bacca es el preferido de Lopetegui, que Florentino esperará septiembre cuando se ejecutan unas clausulas que facilitan la salida de Neymar, que Cavani está dispuesto a ser “merengue”. Sin olvidar los nombres de Mbapé, Kane y Salah. Cualquiera de ellos sería una luz al final del túnel para la afición madridista, pero en la oficina parecen buscar sin ganas de encontrar.
Por los momentos, el entrenador Lopetegui confía en que Gareth Bale, fichado en 2013 cuando las directrices económicas eran otras tras pagar 97 millones de euros, el joven Vinicius y el criticado Karim Benzema llenarán la cuota de goles que aportaba el lusitano, que ahora reside en Turín.
El galés tendrá todas las oportunidades de demostrar su talento, siempre que se mantenga sano. El ex del Tottenham solo en la temporada 14/15 jugó más de 30 encuentros (31), y su tope de goles fue un año después con 19.
Por su parte, el francés que no hubiese tenido cabida alguna en la selección de su país, que acaba de ganar el Mundial, exhibe 16 goles y 16 asistencias de manera combinada en los últimos dos certámenes de La Liga. Benzema intervino en 61 cotejos durante ese lapso.
Mientras que el brasileño de 18 años de edad, si por fin pasa más tiempo en el Madrid que en el Castilla, deberá acelerar el paso de su madurez porque llega con menos de 50 encuentros entre Serie A, Copa Sudamericana y Copa Libertadores, y 10 goles, vistiendo la franela del Flamengo.
Sin embargo, Lopetegui quien dice no necesitar a nadie más también deberá ingeniárselas para mejorar el centro de la zaga, la plaza de segundo portero e inventar estrategias que eviten fallas defensivas en el mediocampo, sobre todo en el sector izquierdo, por donde nacieron los dos primeros goles de la Juventus en el Bernabeu. Dichos errores pudieron provocar que el cuento de esta crisis hubiese tenido que contarse mucho antes del Mundial de Rusia y sin los vapores de triunfo luego de aquella noche en Kiev.