Texas superará a Irán e Irak en la producción de petróleo en 2019, y si fuera un país, sería el tercer mayor productor del mundo, solo por detrás de Rusia y Arabia Saudí, según los datos que aporta un informe de HSBC. Lo cierto es que en el Estado norteamericano han conseguido abaratar notablemente el coste de la producción de crudo y esto ha hecho que cada vez consigan producir más. Además, mientras los tejanos producen más rápido y más barato, los saudíes aumentan los gastos de producción.
Los avances tecnológicos han hecho que el coste de bombear petróleo en Texas esté por debajo de los 40 dólares por barril. Por todo ello, Estados Unidos está bombeando más petróleo que nunca, de hecho, es capaz de autoabastecerse sin problema y ya no depende de Oriente Medio a la hora de importar petróleo. «Esto no va a traer la paz al mundo, pero hará que el mercado del petróleo, al menos en Estados Unidos, sea menos volátil», aseguró McNally, ex funcionario de la Casa Blanca.
En la zona del Pérmico y de Eagle Ford, donde están los yacimientos de petróleo, se producían 2,5 millones de barriles de crudo al día en el año 2014. Para 2019, las previsiones apuntan que la producción se incrementará hasta los 5,6 millones al día. De esta manera, Texas se convertirá en el Estado que produce más de la mitad del total del petróleo estadounidense.
Por su parte, Irak genera unos 4,8 millones de barriles por día e Irán 3 millones, aunque tras las sanciones de Estados Unidos la producción se reducirá.
No todo es positivo
La cuenca del Pérmico se está quedando sin tuberías para poder transportar todo lo que produce y está explorando otras vías como el transporte en ferrocarril y en camiones. Si que es cierto que se están construyendo más tuberías, pero parece que no van a estar listas a tiempo para poder transportar todo el crudo. Por ello, un 55% de los ejecutivos de la Reserva Federal de Dallas creen que la falta de infraestructura podría ralentizar la producción. De hecho, HSBC cree que la cuenca del Pérmico está siendo «víctima de su propio éxito». Sin embargo, a largo plazo parece que este problema comenzará a disiparse.
Otro de los problemas que parecen tener las empresas petrolíferas que trabajan en la zona es la falta de mano de obra. El bajo nivel de desempleo en Texas y en Estados Unidos está creando una gran demanda de puestos de trabajo que no tiene correspondencia con el número de solicitantes de empleo. «La escasez de mano de obra es cada vez más crítica», destaca un ejecutivo en la CNN.