Las seis personas a bordo fueron rescatadas y están fuera de peligro. Especialistas apuntan a un error humano.
Un avión privado que viajaba desde Austin, Texas, se accidentó al final de la pista de aterrizaje del aeropuerto internacional de Tegucigalpa y se partió por la mitad. Las seis personas a bordo fueron rescatadas y están fuera de peligro, informó la comisión de manejo de emergencias de Honduras.
Según las primeras investigaciones, un error humano pudo ocasionar el accidente, indicaron fuentes hondureñas ligadas a Aeronáutica Civil. Aunque no hay versión oficial, expertos sostienen que el avión aterrizó bien, pero «mucho más adelante de la línea blanca donde las llantas traseras debieron tocar pista», dijo el exdirector de la Dirección de Aeronáutica Civil hondureño, Pavel Espinal.
La nave llegaba por la cabecera sur del aeropuerto, en condiciones aparentemente normales, con cielo nuboso, sin problemas de visibilidad. Sin embargo, aterrizó casi a la mitad de la pista, que mide unos 1.800 metros,en la que solamente pueden aterrizar aviones de otra capacidad.
Imágenes y videos publicados en las redes muestran cómo residentes de la zona retiraron a las personas del fuselaje de un jet Gulfstream blanco, mientras que otras personas rociaban la aeronave con extinguidores de mano. Luego, los bomberos llegaron al lugar y rociaron espuma sobre la aeronave.
Una pista corta, y un aeropuerto complicado
El exdirector de la Dirección de Aeronáutica Civil hondureño considera que quizá era la primera vez que el piloto aterrizaba en Toncontín y no hizo la lectura adecuada de todo capitán que llega al aeropuerto de la capital hondureña. Señaló que no se trata de una pista «peligrosa, sino de mucho cuidado».
Además, el descenso para aterrizar en Tegucigalpa requiere mayor pericia, principalmente para aviones comerciales de mayor tamaño, como los Boeing de líneas como las que vuelan a diario a Honduras: American Airlines, Continental y Delta, y Copa y Avianca, más pequeños bimotores de empresas locales.
Las opiniones oficiales y privadas, sobre si el Toncontín es peligroso, van desde los que dicen que sí y los que creen que no, aunque si la pista fuera más larga, quizá no hubiera ocurrido otros dos accidentes idénticos, uno con uno comercial en mayo de 2008 y otro militar en abril de 1997.
Un nuevo aeropuerto
La respuesta a eso está en marcha con la construcción del Aeropuerto Internacional de Palmerola, 75 kilómetros al norte de Tegucigalpa, una obra iniciada hace más de un año por el gobierno que preside Juan Orlando Hernández.
El avión accidentado, con matrícula estadounidense N813WM, con capacidad para unos 20 pasajeros, procedente de Austin, Texas, sur de Estados Unidos- se salió de la pista en la cabecera norte del aeropuerto cuando intentaba aterrizar, hacia el mediodía local.