El condado más chico de Texas se convirtió el lunes en el primero en sumarse a un programa que permite verificar si los empleados están autorizados para trabajar en el país. También ofrece rebajas en las multas si se detectan irregularidades y promete «una fuerza laboral estable».
Rockwall, en el norte del estado, es ahora miembro del programa de acuerdo mutuo entre empleadores y el gobierno de ICE (IMAGE, por sus siglas en inglés).
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas iniciativa fue lanzada en el 2006 e incluye a E-Verify. La principal diferencia con ese sistema es que el empleador se somete a una auditoría en la que se examina si todos sus trabajadores tienen permisos laborales. También se compromete a tener una política según la cual verifica el estatus de sus trabajadores internamente una vez al año, señalaron representantes de ICE.
A cambio, la agencia ofrece entrenamiento para detectar documentos fraudulentos y orientación para evitar la discriminación, acotaron.
«Si creen que tienen problemas, es mejor dar un paso al frente» e implementar IMAGE, señaló la agente especial Katrina Berger durante una rueda de prensa en la sede de ICE en Irving.
Berger señaló que si se encuentran infracciones de las leyes laborales, las multas serán eliminadas o reducidas, siempre que no haya una violación grave.
Cerca de 175,000 empleadores en Texas usan el sistema E-Verify, que permite verificar si el empleado puede trabajar legalmente en el país, de acuerdo con estadísticas del Servicio de Inmigración y Ciudadanía (USCIS), que maneja el programa.
La agencia no había respondido un pedido de información de Univision Noticias para conocer cuántos condados de los 254 en el estado participan solamente en E-Verify.
Las dependencias estatales y sus contratistas en Texas deben usar E-Verify. Sin embargo, a pesar de que la Legislatura aprobó la ley «antisantuario» SB4 el año pasado, considerada la medida estatal más dura contra los indocumentados, no avanzó un proyecto legislativo que hubiese penalizado a quienes incumplieran la política del 2014 y contrataran a indocumentados, destacó el Texas Tribune.
En el caso de Rockwall e IMAGE, representantes de ICE le presentaron el programa al departamento de Recursos Humanos del condado. Para el exalcalde de la ciudad y juez del condado, David Sweet, «no había nada que pensar» a la hora de decidir si sumarse o no al programa voluntario, pues los ayuda a «cumplir con la ley» y es gratuito. El condado tiene cerca de 300 trabajadores, señaló.
Sweet, un republicano elegido en el 2014, cree que IMAGE debería ser obligatorio.
Los críticos de E-Verify han argumentado que es ineficiente, que consume tiempo y recursos, que puede haber errores y que empleados o empleadores puden aprovechar sus fallas.
En el año fiscal 2017, menos del 1% de los 34.8 millones de casos que pasaron por el sistema fueron rechazados. Un 0.15% de los que no fueron verificados inicialmente fueron luego autorizados, según USCIS.
En enero, el Departamento de Seguridad Nacional destacó que planeaba realizar más inspecciones en lugares de trabajo.