El ‘mal necesario’ que eleva los precios de los alimentos básicos
Noti-America Republica Dominicana
Por la noche, José Batista compra casi todos los días hasta 15. 000 pollos vivos de una granja de La Vega. El 6 de enero vendieron la libra a RD $ 38. Parte de la carne de ave se procesó en la madrugada del día 7 y en la mañana su carne fresca se vendió al por menor a RD $ 65 el kilo y RD $ 60 a los supermercados. Este último lo vendió por RD $ 70. Pero Batista se sorprendió de que otras empresas lo ofrecieran por RD $ 79. Así funcionan los diferentes mercados locales de precios de alimentos.
Esta historia es parte del especial “Intermediarios, precios y consumidor” de Diario Libre, realizado por Mariela Mejía y Joaquín Caraballo.
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Al atardecer de casi todos los días, el negocio de José Batista compra hasta 15,000 unidades de pollos vivos en una granja de La Vega. El pasado 6 de enero le vendieron la libra a RD$38. Una parte de las aves fue procesada en la madrugada del día 7, y en la mañana su carne fresca se vendió al detalle a RD$65 la libra y a RD$60 a colmados. Estos últimos la vendían a RD$70. Pero Batista se sorprendía de que otros comercios la ofertaban hasta a RD$79, siendo así como funciona el dispar mercado local de los precios de los alimentos.
En el país, alimentos que componen la canasta básica llegan caros al consumidor y sectores lo atribuyen a la participación de los intermediarios en la cadena de distribución. Aunque el Gobierno, productores y comerciantes los consideran necesarios, hace falta una regulación en los márgenes de beneficios que obtienen. Hay quienes apuntan a que ese regulador sea el mismo Gobierno.
“Le pongo el precio que yo entienda, pero le pongo un precio razonable”, dice Batista al referirse a cuánto vende la libra de pollo en los 30 puntos de venta de su empresa intermediaria Pollos Jobalo. Combustible, sueldos, energía eléctrica, seguridad social y otros gastos operativos los distribuye en el costo de cada libra que vende.
Sabe que hay otras granjas que ofrecen pollo vivo a RD $ 44 y RD $ 50 la libra y que la diferencia de precio se refleja en el precio final al consumidor. «A veces nos culpan a nosotros, los intermediarios (por los altos precios) . Esas empresas que venden pollo a ese precio no los controlan, el gobierno podría controlarlos», dice.
La Junta Agroempresarial Dominicana calcula que alrededor del 85 % de los productos agropecuarios que se consumen en el país se produce localmente. Los productores, intermediarios y comerciantes venden esos alimentos en un libre mercado, donde cada quien pone el precio que más le beneficia.
Solo en el sector avícola, los intermediarios se incluyen dentro de los empleos indirectos, que la Asociación Dominicana de Avicultura estima en 90,000.
“El plátano, cuando sale de la finca, antes de llegar al consumidor final pasa por seis o siete manos, y cada quien le pone su ganancia, y ya tú puedes entender que el de menos ganancia es de donde sale, que es el productor”, indica el presidente de la Asociación de Productores de Plátanos de Azua, Alexis Marte.
En octubre pasado se acrecentó la queja en la población por el alto precio de un plátano. Cuando en ese mes en finca se vendía en promedio a RD$12.47 la unidad verde, grande, el minorista la tenía a RD$20 o más y el supermercado a RD$29 y hasta RD$32.
“Ahora mismo está saliendo un plátano de Azua a 16 pesos y 15 pesos. Cuándo llegue al consumidor final, llegará sobre los 30 la unidad. En tiempo de cosecha normal, el precio del plátano sale en 8 y 10 pesos”, dice Marte.
En septiembre de 2020, en promedio los productores vendían las cebollas rojas criollas en la finca a RD$32.22 la libra, pero el mayorista la aumentaba a RD$51.40, el minorista la subía a RD$67.30 y el supermercado la llevaba a RD$76.79, de acuerdo a reportes de precios que publica el Ministerio de Agricultura.
Esta historia es parte del especial “Intermediarios, precios y consumidor” de Diario Libre, realizado por Mariela Mejía y Joaquín Caraballo.
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Al atardecer de casi todos los días, el negocio de José Batista compra hasta 15,000 unidades de pollos vivos en una granja de La Vega. El pasado 6 de enero le vendieron la libra a RD$38. Una parte de las aves fue procesada en la madrugada del día 7, y en la mañana su carne fresca se vendió al detalle a RD$65 la libra y a RD$60 a colmados. Estos últimos la vendían a RD$70. Pero Batista se sorprendía de que otros comercios la ofertaban hasta a RD$79, siendo así como funciona el dispar mercado local de los precios de los alimentos.
En el país, alimentos que componen la canasta básica llegan caros al consumidor y sectores lo atribuyen a la participación de los intermediarios en la cadena de distribución. Aunque el Gobierno, productores y comerciantes los consideran necesarios, hace falta una regulación en los márgenes de beneficios que obtienen. Hay quienes apuntan a que ese regulador sea el mismo Gobierno.
“El plátano, cuando sale de la finca, antes de llegar al consumidor final pasa por seis o siete manos, y cada quien le pone su ganancia, y ya tú puedes entender que el de menos ganancia es de donde sale, que es el productor”, indica el presidente de la Asociación de Productores de Plátanos de Azua, Alexis Marte.
En octubre pasado se acrecentó la queja en la población por el alto precio de un plátano. Cuando en ese mes en finca se vendía en promedio a RD$12.47 la unidad verde, grande, el minorista la tenía a RD$20 o más y el supermercado a RD$29 y hasta RD$32.
“Ahora mismo está saliendo un plátano de Azua a 16 pesos y 15 pesos. Cuándo llegue al consumidor final, llegará sobre los 30 la unidad. En tiempo de cosecha normal, el precio del plátano sale en 8 y 10 pesos”, dice Marte.
En septiembre de 2020, en promedio los productores vendían las cebollas rojas criollas en la finca a RD$32.22 la libra, pero el mayorista la aumentaba a RD$51.40, el minorista la subía a RD$67.30 y el supermercado la llevaba a RD$76.79, de acuerdo a reportes de precios que publica el Ministerio de Agricultura.
Tomas Marcano, presidente del Consejo Nacional del Comercio en Provisiones, atribuye a la intermediación el comportamiento de los precios en mercados y supermercados. “Nosotros no tenemos control sobre eso, sino que hay que pagar lo que diga el mercader”, dice.
Él defiende que los productos sean más costosos en los supermercados dado los gastos de estos establecimientos en impuestos, salarios, mantenimiento de la planta física, energía eléctrica y otros.
“Obligatoriamente el supermercado tiene que tener una cierta diferencia grande entre un mercader, donde tu vas y encuentras hasta (comida)… tirada en el piso”, comenta.
Consumidores reportan que desde que se declaró la actual pandemia del coronavirus en marzo de 2020 —que degeneró en la declaratoria de estado de emergencia y control de la movilidad—, los precios de los alimentos comenzaron a tener una tendencia al alza. Según los datos que publica el Ministerio de Agricultura, algunos productos aumentaron más que otros.
Pavel Concepción, titular de la Asociación Dominicana de Avicultura, defiende a su sector argumentando que con el covid-19, se quedó una gran producción de pollos en la granja. “Los productores redujeron la producción porque no sabían qué hacer con los pollos; el precio se disparó”, dice. Además, se incrementaron los costos de los insumos a nivel internacional.
Eduvigis Amaro calcula que antes de la pandemia, la compra del supermercado le costaba entre RD$10,000 y RD$11,000. Ahora, por los mismos productos, puede pagar entre RD$15,000 y RD$16,000.
“Pienso que es por el alza del dólar y el efecto de la pandemia, por la baja producción, y de la gente (los vendedores) aprovechándose también”, dice la ama de casa.
En diciembre de 2020, el Banco Central de la República Dominicana informó que el costo de la canasta familiar en hogares de bajos ingresos fue de RD $ 21,610. 57 y en los de mayor ingreso de 61. 192 RD $. 04. El promedio nacional fue RD $ 36,760. 56, o este último monto RD $ 176. 42 más que en octubre.
Las familias de menores ingresos o pertenecientes al quintil 1, gastan el 31.2 % en alimentos y bebidas no alcohólicas; las del quintil 2, el 27.9 %; del quintil 3, el 24.9 %; del quintil 4, el 20.7 %, y los hogares del quintil 5 o de mayores ingresos el 12.9 %, de acuerdo a la Encuesta Nacional de Gastos e Ingresos de los Hogares (ENGIH 2018) del Banco Central.
El ministro de Agricultura, Limber Cruz, reconoce que la intermediación es necesaria porque el productor no puede asumir la distribución. “No pretendas tú que un productor que produce dos o tres quintales de yuca, por ejemplo, coja para la capital a traerla o para Santiago, para donde quiera que salga, a comercializar eso. Se le hace muy difícil por el volumen, se le hace muy costoso”, dice.
Pero, aunque apoya su participación en la cadena de distribución, también la responsabiliza de que los productos lleguen encarecidos al consumidor. “No es la intermediación que hay, sino el exceso de intermediación que hay entre el productor y el punto final del consumidor”, ha dicho. Asimismo, ha denunciado la existencia de especulación, alegando que alguien en la cadena está poniendo un margen de beneficio por encima de lo normal.
Modificar la estructura de la cadena eliminando a los intermediarios no es una opción viable. En esto coinciden todos los sectores privados y públicos consultados.
“Son necesarios (los intermediarios) porque tenemos los pollos a las 8 de la noche, y ese pollo está picado en un colmado en Higüey al otro día”, dice Concepción. “La cantidad de gente que interviene para distribuir un camión de pollo es mucha. Es un negocio totalmente diferente al que ellos (los productores) están acostumbrados, que es producir”.
¿Cuánto costaría la libra de pollo si se quitan los intermediarios?, le pregunta Diario Libre. “Puede bajar entre un 10 por ciento, tal vez, de lo que es”, responde.
“Los intermediarios son necesarios, lo que hay es que buscar la estabilidad de la producción para que los precios, los márgenes sean mínimos”, enfatiza Concepción.
Fuente DL.