¿Por qué debes desinfectar las latas antes de abrirlas?

NotiAmérica (España)
Madrid, España

Basta una ojeada para darnos cuenta: las latas acumulan mucho polvo y suciedad en las estanterías de las tiendas. Aunque cuando salen de la fábrica están protegidas en envoltorios, la manipulación y la exhibición en los mercados favorece su contaminación. Es en las latas y los envases donde se acumulan los patógenos que acceden directa y rápidamente a nuestro organismo, al entrar en contacto con la boca. Este es el caso de las bebidas en lata, las que no solemos tomarnos el tiempo de desinfectar.

Precauciones antes de abrir cualquier lata
Asegúrate de que la lata no tiene abolladuras, ni está oxidada en los bordes, o hinchada. Cualquiera de estas posibilidades indica que puede tener el contenido en mal estado.
 Si la lata está hinchada, probablemente está contaminada por microorganismos.
 Cuando la lata está golpeada y deformada, pueden haberse creado fisuras y el metal, al oxidarse, entrará en contacto con el contenido contaminándolo.
 Si observas que tiene rastros de polvo, utiliza un paño para limpiarla. Si ves que hay signos de manchas aceitosas, usa un paño empapado en alcohol, o una toallita desinfectante.

Los productos enlatados de pescado deben limpiarse bajo el grifo, con un detergente. Generalmente, la lata se abre sobre un plato o en un bol, y todo su contenido se escurre por la parte exterior de la lata, donde podrían existir microorganismos dañinos.

Desinfección necesaria de las latas antes de su uso
Las latas almacenadas en depósitos con malas condiciones sanitarias, fácilmente se infectan con orina animal y pueden ser una fuente de transmisión de distintos tipos de enfermedades, como la leptospirosis. Esta enfermedad es causada por una bacteria que se encuentra en la orina de las ratas.

Los síntomas de esta enfermedad incluyen fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares y malestar generalizado en todo el cuerpo. El polvo acumulado, particularmente en los bordes de las latas, puede estar contaminado la bacteria Bacilluscereus, que causa diarrea, dolor abdominal y vómitos.

Otra posibilidad de que las latas estén contaminadas, es por la presencia de insectos como moscas, arañas o cucarachas que hayan transitado por sus superficies. Si no tienes en cuenta que la gran mayoría de las latas están contaminadas con algún tipo de patógeno, corres el riesgo de enfermar.

Las latas que se abren en la cocina, con alimentos para cocinar, tienen pocas probabilidades de portar microorganimos nocivos. Pero si el contenido no se va a cocinar es especialmente importante desinfectarlas, como es el caso del atún o las legumbres para ensalada.

¿Qué ocurre con los refrescos?
Las latas de refrescos y de bebidas alcohólicas son aún más peligrosas. No conocemos el sitio donde las han almacenado y nos las llevamos directamente a la boca. Pero actualmente llevamos siempre con nosotros alcohol en gel o toallitas desinfectantes, para comenzar a practicar este sano hábito de desinfectar las latas antes de abrirlas.

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Fuente: www.okdiario.com