Nosotras únicas
NOTI-AMÉRICA PERÚ
Por Geomar Pacheco Rivera
Pioneras es nuestro rol en la sociedad donde nos toca crecer y servir desde la condición de mujer. No existe la posibilidad de cambiar lo innato, ser dadoras de vida es la misión esencial biológica. Amamantar y ver crecer a los hijos es parte de todo el abanico de posibilidades en la juventud y adultez.
Somos el 49.5 % de la población en el planeta Tierra. Sin embargo, nuestra voz aún es desdeñada por los varones machistas, quienes en algunos casos heredan el machismo de otras mujeres, sus madres.
Nuestros deberes desde pequeñas suman más. El solo hecho de nacer féminas nos condiciona en las sociedades tradicionales a ser quienes cumplen las órdenes de los padres que van desde cuidar a los hermanos menores, ser buena estudiante, e incluso a veces ser aliada de la madre.
Para las mujeres de hoy, que haya mujeres que llegan a ser pilotos de aviones o astronautas, nos llena de orgullo y valor. No interesa de qué país sea la dama que nos alegra y estimula al resto saberlo, nos fortalece, la esperanza crece y que otras sean capaces de hacerlo es el anhelo.
En el Perú, tenemos después de 201 años de vida independiente a una dama como presidenta de la República y hemos logrado, en el papel, vía congresal equidad y paridad en algunas actividades profesionales como la política.
A pesar de estos esfuerzo, 146 mujeres calcinadas es el motivo que nos lleva a conocernos hoy, buscando la justicia y mejores condiciones de vida para todos sin excepción. La lucha es dura y rebelde, la religión y costumbres atan a muchísimas damas en el planeta Tierra en el 2023.
Nacer mujer en el siglo XXI viene con reservas y desconciertos.
Conocen de tecnologías y son muy despiertas para aprender.
Ya las conoceremos.
Amarse, quererse, respetarse y vivir con dignidad nos hace más valiosas para sí mismas.