Perú prosigue con su etapa de convulsión política después de la detención del presidente Pedro Castillo este miércoles pasado y de la asunción del poder por parte de la que era hasta entonces la vicepresidenta de la República, Dina Boluarte.
La nueva presidenta de Perú declaró su intención de mantenerse en el poder hasta 2026, cuando terminaba el ciclo gubernamental del Ejecutivo en el poder, pero ha cedido a las presiones populares y ha decidido proponer al Congreso la convocatoria de elecciones para el mes de abril del año 2024, adelantando el proceso electoral dos años. “Interpretando de la manera más amplia la voluntad de la ciudadanía, he decidido asumir la iniciativa para lograr un acuerdo con el Congreso de la República para adelantar las elecciones generales para abril del 2024”, anunció Dina Boluarte en un discurso televisado dirigido a la nación.
Las protestas y altercados han sido fuertes en el país andino, lo que ha acrecentado la tensión en el país. Precisamente, la propia Dina Boluarte anunció también la declaración del estado de emergencia “en las zonas de alta conflictividad social”, haciendo referencia a los territorios del sur del país donde se han dado más disturbios, con la intención de recuperar el control del orden interno “pacíficamente”. En su mensaje televisado, la presidenta Boluarte informó sobre la declaración del estado de emergencia y anunció que había dado “las instrucciones para que se recupere pacíficamente el control del orden interno, sin afectar los derechos fundamentales de la ciudadanía”.
Las protestas registradas dejaron, al menos, dos personas muertas en el sur andino por los enfrentamientos con la Policía. Unas manifestaciones que se multiplicaron por el territorio nacional tras la destitución y detención de Pedro Castillo después de que este decidiese disolver el Congreso y establecer un Gobierno de excepción. El ya expresidente fue detenido y encarcelado acusado de un delito de rebelión y conspiración, como señaló la Fiscalía nacional. El hasta entonces presidente de la República fue señalado por dar una especie de autogolpe de Estado, en una situación difícil porque no gozaba del apoyo del Ejército, ni de parte del Gobierno, ni de una parte importante de su partido Perú Libre. De hecho, Pedro Castillo sufrió hasta tres mociones de censura tras ser acusado de corrupción y “permanente incapacidad moral” después de haber realizado varios cambios en su equipo gubernamental.
Los manifestantes peruanos han venido exigiendo últimamente el cierre del Congreso y adelanto de las elecciones tras la salida de Pedro Castillo, quien todavía sigue teniendo sectores de la ciudadanía a su favor que piden su liberación, como afirman diversos medios locales.
El ministro de Interior, César Cervantes, señaló que el estado de emergencia entrará en vigor en las regiones de Apurímac, Arequipa e Ica, en el sur del país, y que se implementará “lo más pronto posible”, como informaron los medios peruanos.