Un gran film, ‘Pequeño país’, del director francés Eric Barbier, ha sido la película triunfadora en el V Festival Internacional de Barcelona-Sant Jordi (BCN FILM FEST), y que a lo largo de dos semanas ha proyectado simultáneamente en la capital catalana y en Madrid una notable selección de la producción cinematográfica actual.
A Contracorriente Films consolida con esta quinta edición su apuesta por el cine documental, descubridor de eventos o acontecimientos decisivos pero que apenas se asoman a las primeras páginas de los grandes medios. Y, por supuesto, por la ficción a partir de los denominados hechos reales. Lo demuestra el máximo galardón de este festival para una película que es una adaptación de la novela de Gaël Faye, en la que se narra la vida feliz de un niño en Burundi, pero cuya peripecia cambia radicalmente cuando estalla la violencia en Ruanda en 1993; la mayor matanza del siglo XX en el continente africano.
Isabelle Kabano, que protagoniza esta película, comparte el galardón de mejor actriz con Denise Gough, que lo hace en otra gran película danesa, ‘The good traitor’, una producción que narra la peripecia de Henrik Kauffmann, embajador de Dinamarca en Washington en 1939 cuando estalla la II Guerra Mundial. Encarnado por Ulrich Thomsen, galardonado también con el premio al mejor actor, en aquel ambiente de antagonismos sin matices el diplomático Kauffmann se declara a sí mismo como el verdadero representante de una Dinamarca libre en oposición a los nazis.
La otra gran triunfadora es la película portuguesa ‘Sombra’, del realizador Bruno Gascón, acreedora al Premio de la Crítica y del Film-Historia por sus valores históricos. Con un reparto encabezado por una soberbia Ana Moreira, la película se adentra en el lacerante drama de los secuestros de bebés en las maternidades. Con un gran pulso narrativo, Bruno Gascón describe la lucha de una madre que, años después de la desaparición de su hijo, sigue tratando de encontrarlo después de un secuestro que la justicia no puede resolver, mientras se mueve en un universo que se empeña en obligarla a llorar a un niño al que ella cree todavía vivo.
Además de las 60 películas exhibidas, de las cuales 4 han sido premières mundiales, 1 internacional, 3 europeas, 17 españolas y 7 catalanas, por Barcelona han pasado y celebrado encuentros y coloquios personajes como Isabelle Huppert, Johnny Depp, Eric Barbier, Fernando Trueba, Fernando Colomo, Karra Elejalde, Toni Acosta, Carmen Chaplin, Clara Lago o Eduard Cortés.
Johnny Depp ha hecho una apuesta decidida por este Festival, presentando sus dos últimas películas. En la última, ‘El fotógrafo de Minamata’, se mete en la piel de un fotoperiodista en medio de uno de los tantos atentados contra la salud y el medio ambiente que a diario atentan contra la vida en nuestro planeta. Una narración sin concesiones a la épica, lo que la convierte en más cercana a la realidad que viven los reporteros que nos hacen conocer lo que se cuece a nuestras espaldas. Inevitable evocar a este respecto, con un sentido homenaje de recuerdo, a los dos últimos reporteros españoles asesinados en Burkina Faso: David Beriáin y Roberto Fraile.
El festival ha servido también para que los guionistas y demás profesiones de la industria cinematográfica celebraran intensos coloquios y mesas redondas, en todos los cuales ha emergido un optimismo esperanzado en que, además de los nuevos formatos y plataformas de exhibición, el cine vuelva a contar con la imprescindible presencia física de los espectadores en su hábitat natural: las salas y sus pantallas grandes. A pesar de las restricciones, el festival ha contado con 11.000 espectadores en sus 121 sesiones con público, un 37% más que el año anterior. Un índice sin duda esperanzador.