ORTEGA PERSIGUE A SACERDOTES QUE CRITICAN SU ESTILO DE GOBIERNO
NOTI – AMÉRICA | NICARAGUA
El régimen de Daniel Ortega ha desatado en los últimos días una cacería contra sacerdotes y feligreses católicos que se atreven a criticar públicamente su forma de gobernar el país. La Conferencia Episcopal de Nicaragua sigue guardando silencio a pesar que ha recibido una ola de manifestaciones de solidaridad a nivel internacional, el mismo papa Francisco a manifestado desde el Vaticano su preocupación por estos acontecimientos.
El gobierno sandinista ha deteniendo a cuatro sacerdotes católicos en menos de 72 horas, su delito ha sido expresar durante la homilía sus muestras de solidaridad con monseñor Rolando José Álvarez Lagos, el obispo de la Diócesis de Matagalpa y Administrador Apostólico de la Diócesis de Estelí guarda prisión en las celdas de máxima seguridad de la cárcel la Modelo, Álvarez fue condenado por la tiranía sandinista a 26 años de prisión por negarse a salir desterrado a los Estados Unidos.
Este martes (ayer) la policía sandinista detuvo en la ciudad de Masaya al sacerdote Donald García, según los uniformados, durante el allanamiento a la casa del sacerdote en el populoso barrio de Monimbó encontraron una escopeta calibre 12 sin permiso de portación, el religioso permaneció encarcelado unas horas siendo liberado bajo amenazas de cárcel si volvía hablar del encarcelamiento de monseñor Alvarez.
Este mismo día (14) la dictadura expulsó del país al sacerdote italiano, Damián Muratori, después de pronunciarse durante su homilía a favor del obispo Álvarez encarcelado por su reclamo en defensa de los derechos humanos. El fraile italiano realizaba su servicio religioso desde hace varios años en la comunidad campesina de San Rafael del Norte, departamento de Jinotega. El gobierno sandinista expulsó a Muratori con el pretexto que era requerido por la INTERPOL porque pesa una denuncia en su contra de violencia sexual en su país de origen.
Otros dos sacerdotes también fueron encarcelados por unas horas este fin de semana, Erick Ramírez Velásquez, de la parroquia de Telpaneca, departamento de Madriz, y Adalí Carrasco, de Ciudad Antigua, departamento de Nueva Segovia, la policía los detuvo por hablar cuando oficiaban la misa de la situación del obispo Rolando Álvarez, los dos religiosos antes de ser liberados le prohibieron hablar del obispo encarcelado.
Cabe destacar, que la tiranía Ortega Murillo reconocida por su sincretismo y prácticas esotéricas, prohibió en diciembre pasado las procesiones religiosas, ahora el gobierno trata de controlar las homilías y restringir las actividades de la feligresía Católica de Nicaragua.