Quién fue Ruth Handler, la pionera empresaria que creó a Barbie
NOTI-AMERICA.COM | MÉXICO – En la nueva y exitosa película «Barbie», la creadora de la famosa muñeca tiene un papel crucial.
El espíritu de Ruth Handler aparece en la primera escena, cuando se encuentra con Barbie en el cuartel general de Mattel, la empresa creada por Handler y su esposo y «hogar» de la muñeca. Y también es clave en el clímax de la película, cuando aconseja a Barbie sobre su futuro.
Handler, quien presidió Mattel por casi dos décadas, es retratada en la película -que está siendo un éxito en la taquilla- como un alma benevolente, seria, práctica en comparación con la ingenua e idealista Barbie. Incluso en un punto hace un chiste con sus problemas con la ley, cuando en 1973 fue expulsada de su propia empresa tras ser acusada de falsificación de documentos fiscales.
Pero ¿cuál fue la historia en la vida real de la pionera empresaria Ruth Handler?
Matt y Elliot
Era la década de 1950 y Ruth Handler era una mujer ocupada. Durante la guerra, esta estadounidense hija de inmigrantes polacos -la más pequeña de 10 hijos- había trabajado como taquígrafa.
Pero tras contraer matrimonio con su amor desde la adolescencia, Elliot un ingeniero industrial que se dedicaba a hacer muebles la pareja se dedicó a lanzar un emprendimiento propio en Los Ángeles.
Junto con un amigo, Harold “Matt” Matson, fundaron en 1945 una empresa que creaba marcos utilizando el nuevo material estrella de la época: el plástico.
El nombre de la compañía fundía los nombres de Matt y Elliot: Mattel Creations. Pero la empresa era presidida por Ruth. Al poco tiempo Matson debió vender su parte del negocio por problemas de salud por lo que los Handler quedaron como únicos dueños.
Empezaron a ampliar sus creaciones, primero fabricando muebles para casas de muñecas y luego su primer juguete: el “Uke-A-Doodle”, un pequeño ukelele de plástico que resultó ser un éxito. Eso los inspiró a dedicarse de lleno a la fabricación de juguetes.
Además de manejar la empresa, Ruth se dedicaba a criar a los dos pequeños hijos de la pareja, Barbara (Barbie) y Kenneth (Ken).
Fue observando cómo jugaba su hija que dio con una revolucionaria idea que terminaría siendo no solo el mayor éxito comercial de Mattel, sino la muñeca más vendida de la historia: Barbie.
Hasta ese momento los muñecos de plástico eran siempre de bebés o niños, y las pequeñas jugaban a ser madres. Ruth se dio cuenta de que su hija creaba sus propias muñecas adultas en papel y se divertía creándoles ropa e imaginando cómo era su vida.
“Durante años la observé jugando a las muñecas de papel con sus amigas, y quedé fascinada con la manera en que jugaban y se proyectaban a sí mismas”, contaría la propia Ruth a la BBC en una entrevista en 1997.
Concluyó que las niñas querían mucho más que jugar a ser mamás: querían poder fantasear cómo sería su vida de adultas.