Un juez federal bloqueó la petición del Gobierno de Donald Trump de suspender el programa migratorio bajo el que se amparan más de 300.000 personas. Migrantes de El Salvador, de Nicaragua, Haití y Sudán quedan así protegidos.
© Kyle Grillot / Reuters | Escritos de denuncia sobre vehículos, momentos antes de que el sindicato Hermandad Internacional de Camioneros (Teamsters Union) participen en una caravana de remolques rodeando el Centro de Detención metropolitano de Los Ángeles, en apoyo a los conductores de camiones del puerto y otras personas amenazadas por la deportación si los tribunales o el Congreso no detienen la suspensión del Estatus de Protección Temporal (TPS) en Los Ángeles, California, EE. UU., el 3 de octubre de 2018.
Fuente: https://www.france24.com / Janira Gómez Muñoz
Los ciudadanos salvadoreños, nicaragüenses, haitianos y sudaneses que viven en Estados Unidos se salvan desde hoy de ser deportados a sus países de origen.
Esto se debe a que un juez del estado de California bloqueó la petición de la Administración del presidente Donald Trump de suspender los programas migratorios Estatus de Protección Temporal (TPS) de los que se benefician países como El Salvador, Nicaragua, Haití y Sudán.
Por más que cada país tuviera una fecha diferente de terminación del TPS, el magistrado Edward Chen consideró que terminar con el programa supondría “un daño irreparable” para más de 300.000 inmigrantes y sus familias que debían abandonar el país.
“Las economías locales y nacionales se verán perjudicadas si cientos de miles de beneficiarios del TPS son desarraigados y echados”, afirmó este 3 de octubre el juez federal Edward Chen.
El Gobierno de Trump les pidió que se preparasen para “su salida”
Desde el año pasado, el Gobierno de Trump estaba empeñado en reevaluar las condiciones del permiso, ya que no lo consideraba necesario para muchos países que habían mejorado.
Así el presidente llegó a ordenar a los más de 263.000 salvadoreños, 58.000 haitianos, 5.000 nicaragüenses y alrededor de mil sudaneses (África) beneficiados que preparasen “su salida” de EE. UU. o buscasen una alternativa legal. Mientras a los países receptores los amenazó para que iniciasen el “regreso y reintegración de sus ciudadanos”.
Para Nicaragua, el TPS debía terminar en enero de 2019, para Haití en julio de ese año y en el caso de El Salvador en septiembre. Con la decisión del juez federal, los inmigrantes podrán seguir bajo el estatus del TPS más allá de las fechas fijadas por el presidente.
Y es que dicho programa lleva desde 1990 otorgando permisos de permanencia y de trabajo (renovados automáticamente cada 18 meses) a los nacionales de países que sufren conflictos bélicos o desastres naturales. Por ejemplo, a Nicaragua se lo otorgó en 1998 tras el paso del huracán Mitch y a Haití en 2010 por el terremoto que dejó unos 300.000 muertos.
Mediante un comunicado, el Departamento de Justicia de EE. UU. ha afirmado que el fallo judicial motivado por el magistrado Edward Chen “usurpa el papel del poder Ejecutivo”, por lo que “seguirá luchando” por el cumplimiento de las leyes de inmigración y la seguridad nacional.