Mattarella propone gobierno técnico, apoyo del PD
Roma – Un gobierno «neutral, de servicio, de garantía» pero con plenos poderes es la propuesta del presidente de Italia, Sergio Mattarella, en un intento in extremis para evitar nuevas elecciones, pero que parecen avanzar a paso firme.
El jefe de Estado, al cierre de la tercera ronda de consultas, se dirigió directamente a los partidos políticos, visiblemente contrariado tras constatar la imposibilidad de cerrar un acuerdo tras las elecciones del 4 de marzo pasado.
También poniendo en evidencia anomalías y riesgos de urnas en «pleno verano» (boreal) o peor aún, en otoño, con la ley del Presupuesto pendiente de aprobar, el aumento del IVA a destrabar y los mercados financieros a tener bajo control.
Si el Partido Demócrata (PD) dio apoyo pleno al Quirinale, la Liga y el Movimiento Cinco Estrellas (M5S) no esperaron la cita en el Parlamento y, poco después del discurso de Mattarella, hicieron saber que no darán su voto para un Ejecutivo de tregua.
Luigi Di Maio, el jefe político del M5S que fue el primero en acudir a la consulta del presidente, ratificó la postura de su movimiento: sí al diálogo con Matteo Salvini (Liga), contemplando un paso al costado sobre el liderazgo, no al Fuerza Italia de Silvio Berlusconi.
El joven de 31 años dijo que la alternativa es votar de nuevo en julio próximo, marcando el cierre de cualquier opción de salvataje del Parlamento.
La misma línea expresó Salvini, que insiste en apoyar un gobierno de centroderecha o el regreso a las urnas «lo antes posible».
Un centroderecha que luego de 60 días de tratativas llega destrozado por las sospechas mutuas y las peleas cada vez más manifiestas.
«Contamos con que Berlusconi mantenga la palabra dada y tenga nuestra coherencia, luego los italianos nos darán la mayoría absoluta y cambiarán Italia solos», dijo Salvini.
Fuerza Italia, como también el «Cavaliere» mostró al término de las consultas, se encuentra en dificultad y aunque aseguró buscar compartir, tomó oficialmente posición en contra de volver a votar en el verano.
Nuevas elecciones en junio están excluidas, aclaró la Presidencia, y quien quiere acelerar apunta a un inédito escenario de llamar a los ciudadanos a sufragar el mes siguiente.
Con el calendario en mano, la fecha posible, observaron fuentes parlamentarias, no sería el 8 de julio, como mencionaron la Liga y el M5S luego de una cumbre entre los dirigentes de la Cámara de Diputados, sino la del 22 de julio, con una campaña electoral a realizar debajo de parasoles. La alternativa tal vez sea peor: nuevas elecciones en el otoño tienen riesgos del ejercicio provisorio y de exponer al país a la especulación financiera.
Dos escenarios que Mattarella no esconde querer desbaratar y es por eso que asume la responsabilidad de proponer un gobierno que pueda conducir el país en esta difícil fase sin renunciar a la idea de que, semana tras semana, pueda madurar en el Parlamento el acuerdo que hasta ahora no se produjo entre las fuerzas políticas.
En ese punto, el equipo de gobierno formado sobre el ingreso del Quirinale iría a casa y nacería un nuevo gobierno político.
De lo contrario, habría igualmente elecciones pero en 2019.
Entre los dirigentes de los partidos, los únicos que apoyan esa idea son todas las corrientes del PD, respaldando la propuesta del jefe de Estado de dar un Ejecutivo con plenos poderes al país, capaz de resolver las tareas delicadas a nivel internacional, incluso de parte Matteo Renzi.
Fuente (ANSA).