El aspirante a la candidatura presidencial demócrata, Beto O’Rourke, presentó su plan migratorio que incluye el camino a la ciudadanía para 11 millones de migrantes, la reunificación familiar, detener la construcción de muro fronterizo y la eliminación de la política de “tolerancia cero”.

​El ex congresista por el distrito de El Paso, Texas, se comprometió a que en un eventual gobierno a su cargo en los primeros 100 días trabajará con el Congreso para legalizar a la población indocumentada, terminar el trato inhumano a niños migrantes y frenar las separaciones forzosas, reportó Univisión Noticias.

En su plan, O’Rourke expuso que prevé medidas para aliviar la crisis migratoria en la frontera sur de Estados Unidos, donde se concentran miles de migrantes que huyen del Triángulo Norte de Centroamérica(Guatemala, Honduras y El Salvador), a causa de la violencia y la pobreza que viven en sus países de origen.

Según su programa, el gobierno que encabezaría destinará cinco mil millones de dólares para reforzar el estado de derecho en los países del América Central, además desplegaría unos dos mil abogados de migración a la frontera sur para asistir a los migrantes que buscan asilo.

El aspirante demócrata se comprometió a facilitar el proceso para los casi 11 millones de indocumentados, que incluye a “soñadores” y beneficiarios del Estatus de Protección Temporal (TPS), que primero deberán ser legalizados y luego obtener la residencia legal permanente.

O’Rourke aseguró que cancelará la política que ordena enviar a México a los solicitantes de asilo hasta que las cortes de migración de Estados Unidos resuelvan sus casos.

Además emitirá una orden ejecutiva para que solo aquellos migrantes con antecedentes criminales y que representan un peligro para la sociedad sean detenidos y deportados.

También eliminará la denominada política migratoria «tolerancia cero», impuesta por el presidente estadunidense Donald Trump, ya sea con apoyo del Congreso o por una orden ejecutiva.

El político demócrata se pronunció porque los solicitantes de asilo tengan acceso a herramientas legales para navegar por el sistema de inmigración y que las cortes de inmigración sean independientes del Departamento de Justicia, entre otras propuestas.