Fuente: https://www.telemundochicago.com
Alicia está lista para recibir no solo un diploma, sino dos en Sociología y Psicología, como estudiante destacada de la Universidad de Tennessee en Knoxville; pero no son solo los diplomas los que recrean su épica sino también lo que ha descubierto en el curso de ese tránsito.
Ella, mejor que nadie, conoció cómo puede ser la vida del inmigrante en Estados Unidos tras tropezarse de manera accidental y a profundidad con la historia de su papá. Gracias a una cátedra universitaria, logró entender cuán difícil había sido para él dejar su Zimapán natal, en México, y emprender una vida lejos en busca sueños y esperanzas nuevas.
Además, él quedó a cargo de ella y sus cinco hermanos y tuvo la responsabilidad de ser padre soltero y sacarlos a todos adelante.
La mayor recompensa para su padre es ahora no solo ver a Alicia culminar la universidad, cuando él apenas alcanzó a completar quinto grado, sino ver que la propia consciencia de su origen ha despertado en ella un sentido solidario que se vuelca en ayudar a otros.
En la actualidad, dedica su tiempo libre a colaborar en organizaciones sin fines de lucro que apoyan a los inmigrantes, además porque ha visto en primera persona los efectos que tienen en las familias las deportaciones e incluso su comunidad, Morristown, fue objeto de un operativo especial de ICE en el 2018.
Ramírez no descarta en un futuro cercano volver a las aulas, esta vez con el posible interés de convertirse en una abogada de Inmigración.