Fuente: https://www.lateja.cr / Shirley Sandí.



Costa Rica en el año 2030 será otra, ya se ha advertido muchas veces que la población cada vez está más viejita y un nuevo estudio, esta vez de la Contraloría General de la República, estimó el impacto en las finanzas públicas por este tema.

 

 

Ahorita tenemos cinco millones de habitantes y 410.000 adultos mayores. En el 2030 tendremos 5,6 millones de habitantes y 728.000 personas de 65 años y más, producto de que cada vez nacen menos bebés y de que la esperanza de vida es alta (77 años para los hombres y 82 para las mujeres).

Los expertos de la Contraloría determinaron que el envejecimiento tendrá consecuencias en la demanda de algunos servicios públicos, mientras que se disparará la cantidad de personas que solicitarán servicios de salud y pensiones, en educación la situación será distinta, más bien bajará.

En pensiones el gasto irá cuenta arriba. Mientras que en 2017 hubo 1,5 millones de cotizantes y 126.492 pensionados por el régimen de Invalidez, Vejez y Muerte de la CCSS, en el 2030 habrá 1,8 millones de cotizantes y más de 324.000 pensionados por este régimen. El gasto en pensiones se disparará 263%.

Y en salud la situación es muy parecida, pues se estima que el gasto aumente en un 86%, ya que la población de abuelitos hace mayor uso de los servicios de consulta externa y hospitalización.

Primaria de caída

Sin embargo, en educación es al revés. Como hay menos población entre los 0 y 18 años, disminuye la demanda de estos servicios, principalmente la población escolar (ver infografía).

Debido al cambio demográfico 62 escuelas han cerrado del 2011 al 2018 por falta de matrícula. Del año 2000 al 2017 la matrícula en primaria cayó en 100 mil chiquitos, pasando de 500.979 a 400 423.

Fotos de adultos mayores del centro diurno de Rincón Grande de Pavas.
Fotos de adultos mayores del centro diurno de Rincón Grande de Pavas.

Así que, de mantenerse constantes, la cobertura y el costo por estudiante, la Contraloría estima que para el año 2030, el gasto en Educación será del 5,2% del PIB y ya no de 8% que está asignado en la Constitución.

Por esta razón la entidad alertó sobre la necesidad de hacer ajustes en el gasto del Estado de acuerdo a estos cambios.

No obstante, es muy posible que esta disminución no se aplique porque el Estado está obligado a invertir el 8% en Educación y solo una reforma a la ley lo cambiaría.

La Contraloría recomendó ponerse águila con respecto al destino que se le da a esta plata y hasta planteó la posibilidad de usar parte de estos recursos en inyectar la educación técnica, el INA principalmente, todo con el fin de que se formen personas en campos donde haya más trabajo.

Cabe destacar que Conape dio a conocer la lista de carreras que ya no financiará porque están saturadas y presentan altos niveles de desempleo.

Entre ellas están varias relacionadas con el campo de la Educación: Educación Física, Educación de Adultos, Educación Preescolar, Francés, Biología, Geografía, Estudios de Género, Literatura y Lingüística, Geología, Antropología, Orientación, Sociología, Psicología e Historia.