Es la segunda acusación contra el exvicepresidente en la última semana.

«No fue sexual, pero me agarró por la cabeza», dijo Amy Lappos a The Hartford Courant el lunes. «Puso su mano alrededor de mi cuello y me jaló para frotarse las narices conmigo. Pensé que me iba a besar en la boca».

Lappos, quien era asistente del Representante Jim Himes, demócrata por Connecticut, escribió por primera vez el domingo sobre el presunto incidente bajo un seudónimo en un grupo de Facebook llamado Connecticut Women in Politics.

Ella dijo que nunca presentó una queja sobre la interacción, pero cree que Biden cruzó una línea.

«Nunca presenté una queja, para ser honesta, porque él era el vicepresidente. Yo no era nadie», dijo Lappos al Courant. «Hay absolutamente una línea de decencia. Hay una línea de respeto. Cruzar esa línea no es algo de abuelos. No es cultural. No es afecto. Es sexismo o misoginia».

Un portavoz de Biden no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre el presunto incidente.

Se espera que Biden anuncie pronto su candidatura presidencial para 2020, y las denuncias de comportamiento inapropiado podrían torpedear su campaña.

Lappos decidió presentar su historia después de que la exasambleísta del estado de Nevada, Lucy Flores, una demócrata, alegara el viernes que Biden la había tocado y besado en la cabeza de manera inapropiada.

Flores escribió que en el mitin de la campaña que apoyaba su candidatura para vicegobernadora en 2014, Biden le puso las manos en los hombros, le olió el cabello y la besó en la nuca.

«El vicepresidente de los Estados Unidos de América me había tocado de una manera íntima y reservada para amigos cercanos, familiares o parejas románticas, y me sentí impotente para hacer algo al respecto», escribió en un artículo de opinión publicado el viernes.

Biden respondió a esa acusación el domingo y dijo: «En mis muchos años en la campaña y en la vida pública, he ofrecido innumerables apretones de manos, abrazos, expresiones de afecto, apoyo y consuelo. Y ni una sola vez, nunca, creí que actué de forma inapropiada».

«Si se sugiere que lo hice, escucharé con respeto. Pero nunca fue mi intención», agregó.

El lunes, un portavoz de Biden rechazó con fuerza las denuncias en un mensaje a periodistas donde acusó a la «industria casera de mentiras» que dijo se ha formado sobre el exvicepresidente que supuestamente cruza una línea entre el afecto y el irrespeto en múltiples incidentes, advirtiendo que el contexto es importante.