Unos 2.3 millones de ciudadanos han emigrado del país sudamericano
Una familia venezolana en Colombia. (GDA, Héctor Fabio Zamora)
Fuente: https://www.elnuevodia.com
Con sobre 2.3 millones de emigrados, ya empieza a ser llamado el mayor éxodo en Latinoamérica en las últimas cinco décadas. Sea por motivos políticos, hambre o expectativas de una vida mejor, a diario ciudadanos de Venezuela golpean las puertas de Colombia, Perú, Brasil, Argentina, Chile y otros países poniendo a prueba la solidaridad de las poblaciones locales y la capacidad de respuesta de las autoridades.
Aunque el gobierno de Nicolás Maduro esta semana calificó de “fake news” la diáspora que se aceleró con su llegada al poder, el presidente de Brasil, Michel Temer, advirtió que esta crisis ya “amenaza la armonía” de América del Sur y la OEA convocó a una reunión de emergencia para tratar el tema.
El Grupo de Diarios América (GDA) quiso retratar este éxodo consultando a sus miembros cómo están siendo afectados los respectivos países.
Argentina
Número de venezolanos: 88,357, según datos oficiales vigentes desde 2004, aunque se supone que la cifra real es bastante mayor, porque muchos llegan como turistas al principio y luego de un plazo máximo de 180 días inician los trámites de radicación, con lo cual se hace difícil contabilizarlos. Otros quizás pueden también dejar el país en ese lapso.
Requisitos de ingreso: documento de identidad e ingresar en categoría turista durante 90 días, con posibilidad de renovación por ese mismo período. En ese lapso, si deciden quedarse, deben gestionar su radicación. Para radicarse, la documentación necesaria es igual a la exigida a cualquier ciudadano del Mercosur y Estados asociados: documento de identidad, haber ingresado por un paso habilitado, presentar certificado de antecedentes penales de su país y de Argentina, y constancia de domicilio.
Últimas medidas específicas del gobierno: El gobierno anunció facilidades en el trámite de residencia a los ciudadanos de Venezuela que deseen ingresar al país con el propósito de radicarse. Asimismo, se estableció un tratamiento preferencial en los trámites de validación de estudios.
Testimonio: Johnoliver León, 24 años, repostero
Tuvo que dejar a su hija y a su familia en Barquisimeto, su ciudad natal, porque ya no había con qué comer. “Mi meta es conocer Buenos Aires”, dice. Eligió ese destino porque uno de los amigos con que viajó tiene un primo ya instalado en Argentina y les aseguró que hay posibilidades de empleo.
Brasil
Número de venezolanos: 30,800, según datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística. En 2015, solo mil venezolanos vivían en el país. Desde mayo, unos 127,000 venezolanos cruzaron la frontera con Brasil, pero el gobierno brasileño estima que más de la mitad se fue a otros países de Sudamérica, por lo que el país se configura como una ruta de paso.
Requisitos de ingreso: Los ciudadanos venezolanos no necesitan visa para entrar a Brasil en condición de turistas o de visitantes de tránsito, y pueden ingresar con su pasaporte o cédula de identidad vigente. El plazo máximo de permanencia en el país como turista es de 60 días.
Últimas medidas específicas del gobierno: En 2017, el gobierno brasileño aprobó un decreto para conceder la residencia temporal por un período de hasta dos años a los venezolanos que llegan al país escapando de la crisis humanitaria, sin necesidad de recurrir al complejo estatus de refugiado. El presidente Michel Temer envió las Fuerzas Armadas para reforzar la seguridad en el estado de Roraima y dijo que evalúa restringir el número de migrantes venezolanos que ingresan diariamente al país.
Testimonio: Roimer Saballo, 34 años, soldador
Roimer Caraballo, un venezolano que emigró a Brasil. (O Globo/GDA )
Saballo era funcionario de una empresa asociada a Odebrecht en Venezuela y que cerró el año pasado. Así como otros compañeros, se quedó sin dinero. Viajó durante algunos meses en búsqueda de trabajo en otras ciudades y finalmente resolvió intentar en Brasil. Dejó atrás un hijo de ocho años con su madre. Ahora vive en São Paulo, pero en seis meses no ha conseguido ningún empleo. “Nunca estuve tanto tiempo sin trabajo. Ya no necesito un cupo como soldador. Lo que venga, yo acepto”.
Chile
Número de venezolanos: Estimados entre 230,000 y 300,000. Del 1 de enero al 17 de agosto de este año, 159,731 venezolanos ingresaron al país, según datos de la Policía de Investigaciones (PDI).
Requisitos de ingreso: Tener en manos la Visa de Responsabilidad Democrática. Esta debe ser solicitada en el Consulado chileno de Caracas o Puerto Ordaz, y concede un permiso de residencia temporal por un año, prorrogable por el mismo período. Para obtenerla, son necesarios: certificado de antecedentes penales aprobado por la Cancillería venezolana; pasaporte vigente; y certificado de nacimiento (para solicitudes de menores de edad).
Los venezolanos que ingresen como turistas necesitan pasaporte vigente, boleto de regreso al país de origen, acreditar solvencia económica, carta de invitación de una persona natural o una empresa en Chile, y dirección del sitio donde se va a hospedar o reserva de hotel.
Últimas medidas específicas del gobierno: En abril de este año, el gobierno de Sebastián Piñera anunció la creación de la Visa de Responsabilidad Democrática “en razón de la crisis democrática por la que actualmente atraviesa Venezuela, y que afecta gravemente a los nacionales de un país que acogió a muchos chilenos que buscaban refugio en sus fronteras”. Esto facilita la llegada de venezolanos a Chile con garantías para trabajar.
Testimonio: Marialmi Rodríguez, 24 años, periodista en una editorial
Decidió irse de Venezuela hace dos años porque ya había terminado su carrera universitaria y, aunque ganaba dos sueldos mínimos, el dinero no le alcanzaba para apoyar a su familia con los gastos. “A los motivos económicos se me sumaron la inseguridad y la disminución notoria de la calidad de vida en mi familia. En ese momento, la situación no era tan grave como ahora, pero aun así ya tenía varios amigos viviendo en otros países”, cuenta. Chile resultó ser el lugar en el que ella tenía más caras conocidas, y decidió ir a ese país, donde “la solicitud de la visa de residente era mucho más sencilla en comparación con otros países de la región”.
Colombia
Número de venezolanos: se estima que hay un millón, entre regulares e irregulares.
Requisitos de ingreso: Inicialmente era suficiente la tarjeta de movilidad fronteriza y solo se pueden mover en la frontera. Si va a hacer tránsito por Colombia para salir por otra frontera, debe presentar cédula, pasaporte o expedir la tarjeta de salida del país, o no puede transitar por Colombia. A raíz de la ola migratoria y del incidente en la frontera con Ecuador, donde cayó un bus con droga y con venezolanos en su interior, varios países comenzaron a exigirles pasaporte. Para quedarse en Colombia deben tener pasaporte, si van a trabajar deben tener visa de trabajo o visa de residente.
Últimas medidas específicas del gobierno: proveer acceso a servicios de salud y educación. Recientemente se promovió un permiso temporal de permanencia que les garantiza estatus de legalidad y les facilita conseguir trabajo hasta por dos años.
Testimonio: Emilio Enrique Alcalá (39) y su esposa, Xiomara María Tabarés (28)
Ambos dejaron a sus seres queridos, desesperados por el hambre y las humillaciones que padecían en su país. “Allá no hay ni qué comprar. El gobierno nos convirtió en seres egoístas. En Venezuela, antes, tú invitabas a gente a comer a la casa, luego uno los rechazaba pensando en que en las alacenas no había sino una harina de pan”, afirman.
Costa Rica
Número de venezolanos: 8,892, según datos de la Dirección General de Migración y Extranjería.
Requisitos de ingreso: Con pasaporte vigente no se necesita visa consular y la permanencia máxima es de 90 días.
Últimas medidas específicas del gobierno: El gobierno no ha desarrollado nuevas políticas vinculadas con la migración venezolana.
Testimonio: Leonel Ariza Sthormes, 56 años, productor artístico
Salió de Venezuela el 19 de mayo de 2017 por la escasez y la falta de oportunidades de trabajo. “La escasez era de todo tipo, artículos de higiene personal, comida. Sufro de la tensión y a mí el medicamento me lo tenían que enviar desde fuera del país. Salí también porque había hecho comerciales en contra del gobierno y eso se convirtió en un peligro. Salí por salvar mi vida, en todos los aspectos. Decidimos migrar todos los de mi familia y tuvimos que separarnos. Soy casado, tengo tres hijos: uno que vive en Miami y luego mi esposa se fue a Ecuador con mis dos hijas. Yo me vine para Costa Rica porque mi hermana, mi mamá y mi sobrina están aquí”.
El Salvador
Número de venezolanos: La Asociación de Venezolanos en El Salvador cifra en 700 los establecidos en el país.
Requisitos de ingreso: Cualquier venezolano debe solicitar visa para su ingreso a menos que esté contratado por una empresa salvadoreña.
Últimas medidas específicas del gobierno: El gobierno no ha desarrollado nuevas políticas vinculadas con la migración venezolana.
Testimonio: Gabriela Rivera, 47 años, estilista
Por miedo a la escasez, miedo a no conseguir medicina, miedo a que la metieran presa por protestar, Rivera, su esposo y su hijo de ahora ocho años abandonaron Venezuela en 2015. Llegó al país con un traslado de su esposo desde el laboratorio donde trabajaba en Caracas hasta San Salvador.
México
Número de venezolanos: De acuerdo con cifras de la Unidad de Política Migratoria de Gobernación hasta junio pasado, el gobierno de México tiene registrados 8,921 venezolanos con tarjetas de residencia temporal o permanente. No obstante, el número podría ser mayor, porque no se considera a los ciudadanos venezolanos que residen de manera ilegal en el país. La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) reportó un aumento en sus estadísticas, pues mientras en 2013 solo un venezolano pidió asilo a México, en 2017 la cifra creció a 4,042 solicitudes. De ese número, solo 907 fueron procesadas y 3,067 siguen en trámite.
Requisitos de ingreso: Para ingresar a México los ciudadanos venezolanos no necesitan visa.
Últimas medidas específicas del gobierno: El gobierno no ha desarrollado nuevas políticas vinculadas con la migración venezolana.
Testimonio: Eiralin Ramos, 33 años, médico veterinaria
Miguel Méndez y Eiralin Ramos, venezolanos asilados en Mèxico. (El Universal / GDA)
Por qué emigró y escogió México: Ver a un hombre recoger las sobras en un basurero para llevar comida a casa fue el detonante para que decidiera salir de Venezuela, aunque lo tenía pensado debido a que le diagnosticaron cáncer a su mamá y con la crisis en su país era imposible sostener esa enfermedad. “En mi país no hay medicamentos, no hay absolutamente nada con lo cual una persona pueda vivir, el alto costo de la vida es insostenible. Mi mamá se enfermó y por eso tuve que buscar cómo salir de mi país”. Se fue a México porque tenía una amiga que tiene la residencia en Ciudad de México, quien la contactó con una persona que buscaba venezolanos para trabajar.
Perú
Número de venezolanos: Más de 400,000. La cifra representa el doble de lo registrado al mes de abril.
Requisitos de ingreso: Desde el 25 de agosto se exige el pasaporte como único documento de ingreso al país, porque la cédula de identidad expedida por el gobierno venezolano no reunía las medidas de seguridad exigidas, según Migraciones de Perú. Embarazadas, ancianos y menores de edad no necesitan presentar el pasaporte al momento de ingreso al país. La Cancillería y representantes de la Agencia de la ONU para los Refugiados aconsejan a los venezolanos que no cuentan con pasaporte optar por medidas alternativas, como solicitudes de refugio, que permite al solicitante ingresar y desplazarse en Perú. El trámite toma mínimo tres meses.
Últimas medidas específicas del gobierno: El gobierno declaró el estado de emergencia en los distritos de Aguas Verdes, Zarumilla y Tumbes, situados en la región del mismo nombre, por “peligro inminente de afectación a la salud y saneamiento”. La norma tiene vigencia de 60 días. Asimismo, autoridades de Tumbes han solicitado presupuesto adicional para reforzar las labores de limpieza y la seguridad en la ciudad.
Testimonio: Ámbar Cueva, 35 años, peluquera
Decidió a principios de julio irse a Lima con la esperanza de establecerse, trabajar y enviar dinero a Venezuela para traer a su familia, que vive en la ciudad de Valencia (estado Carabobo). Pero a la fecha no ha conseguido empleo como peluquera y el nuevo requisito migratorio del pasaporte frena indefinidamente sus planes. “Yo calculaba que en noviembre mi marido y mis hijos estarían aquí conmigo”, se lamenta. “Ahora mis hijos tienen miedo de que no nos volvamos a ver”, dice sin soltar el celular, donde tiene guardadas fotos de su hijo de 15 años y sus mellizos, de 9.
Uruguay
Número de venezolanos: 9,469 venezolanos. En 2015 eran 1,855
Requisitos de ingreso: Como todos los nacionales de países del Mercosur y Estados asociados, los venezolanos pueden ingresar a Uruguay con pasaporte o documento de identidad en buen estado. Cualquiera de estos documentos les sirve para gestionar la residencia permanente ante la Cancillería uruguaya. Los mayores de 18 años, a su vez, deben presentar declaración jurada de los antecedentes penales o policiales. Cuando se inicia el trámite de residencia, ya se le permite al venezolano obtener la cédula de identidad uruguaya. El trámite de residencia es gratuito y no hay que presentar medio de vida; tampoco carné de salud. Como todo migrante, se puede cambiar de categoría migratoria sin salir del país.
Últimas medidas específicas del gobierno: Uruguay pasó a permitir el acceso a la educación pública incluso de los niños que carezcan del documento de identidad uruguayo. En la práctica, eso hace que el chico venezolano puede iniciar la escuela al día siguiente de su llegada al país. Junto con Naciones Unidas, Uruguay está monitoreando el avance de los flujos migratorios; en especial en lo que sucede en la frontera con Brasil. En un mes se aprobará la exoneración del costode visado para la reunificación familiar y se validarán los documentos electrónicos sin necesidad de apostillado.
Testimonio: Pedro, 27 años, cocinero
Pedro emigró “por hambre y falta de acceso a las medicinas”. Vivía con su madre, perdió el trabajo y la vida se le hizo cuesta arriba. Había salido antes del Mundial de Rusia con unos pocos bolívares, una gorra para el sol y unos pantalones de esos que se transforman en bermudas. Pero el dinero apenas le alcanzó para costear los pasajes de ómnibus hasta la frontera con Brasil. Tras diez días en un campamento en Roraima, en donde le llegaron a ofrecer sexo a cambio de comida, inició su caminata hacia el sur. Iba en fila, en silencio, y solo se detenía para tomar agua o dormir un rato al costado de la ruta. Por momentos, algún camionero o la propia policía le ayudaron a adelantar algún tramo. Y cuando por fin llegó a Porto Alegre, al sur de Brasil, otros venezolanos lo convencieron de que lo más fácil era conseguir trabajo en Uruguay. Estuvo primero en un balneario fronterizo, como pintor. Y ahora hace las veces de cocinero, su oficio, en Montevideo. Pedro no quiso ser fotografiado porque está “aún en shock”.