EEUU suspende la guerra comercial con China tras llegar a un acuerdo
El secretario del Tesoro de EEUU, Steven Mnuchin, ha confimado que su Gobierno ha «suspendido» temporalmente la imposición de aranceles a China, tras una negociación culminada el sábado
El secretario del Tesoro de EEUU, Steven Mnuchin, ha confirmado que su Gobierno ha «suspendido» temporalmente la imposición de aranceles a Chinamientras se aplica el acuerdo marco que ambas potencias anunciaron este sábado para reducir el déficit estadounidense respecto a Pekín. «Hemos acordado poner en suspenso los aranceles mientras ejecutamos el acuerdo marco» comercial, aseguró Mnuchin en declaraciones a la cadena de televisión Fox News.
El pasado marzo, la Administración Trump ordenó el establecimiento de estas tasas a la importación de aluminio y acero por valor de 60.000 millones de dólares, con China en el punto de mira, que a su vez respondió con aranceles del 25% a las importaciones de productos estadounidenses y con una denuncia ante la Organización Mundial de Comercio. Estas medidas desataron el miedo a una guerra comercial generalizada de profundas consecuencias entre las dos mayores economías del mundo.
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La razón del presidente Donald Trump para dar el pistoletazo de salida a este conflicto había sido el déficit comercial entre ambos países, por valor de 375.000 millones de dólares en 2017. Este fin de semana, Pekín y Washington han acordado trabajar para reducir dicho déficit. “Para satisfacer las crecientes necesidades de consumo del pueblo chino y su necesidad de un desarrollo económico de alta calidad, China incrementará sus compras de bienes y servicios estadounidenses. Esto ayudará al crecimiento y al empleo en Estados Unidos. Ambas partes acordaron incrementos sustanciales en exportaciones agrícolas y energéticas estadounidenses”, han declarado ambos países en un comunicado conjunto. En concreto, se impulsarán las exportaciones estadounidenses de productos agrícolas y del sector de la energía, han subrayado las autoridades chinas, lo que «hará crecer la economía estadounidense» y «diversificará y optimizará la oferta de productos para el bienestar del pueblo chino».
Alivio en China
Por su parte, la prensa oficial china también ha dado la bienvenida a los consensos alcanzados el sábado por los negociadores de este país y de EEUU en Washington. «Pekín y Washington salieron de unas negociaciones tensas y difíciles con el acuerdo de no implicarse en una guerra comercial», destacó en un artículo de opinión la agencia oficial Xinhua, que aseguró que en anteriores rondas negociadoras el Gobierno de EEUU había planteado condiciones previas «nada razonables».
De acuerdo con Xinhua, el comunicado conjunto emitido por ambos países tras la visita a EEUU del viceprimer ministro chino, Liu He, envía el mensaje de que «las dos mayores economías mundiales están dispuestas a sortear sus diferencias con el consenso logrado por sus dos presidentes», Xi Jinping y Donald Trump. También señala que «cualquier acción unilateral a expensas de la otra parte estaba condenada a fracasar».
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Otro medio oficial, el periódico ‘China Daily’, subraya que «las constructivas conversaciones de esta semana han ayudado a reducir los temores ante una posible guerra comercial en la que no habría ganadores«. En opinión del rotativo, las dos mayores economías mundiales son «mayoritariamente complementarias por naturaleza», por lo que deben expandir la cooperación en beneficio mutuo en lugar de acudir a continuas represalias. También afirma que el déficit de la balanza comercial estadounidense con China «es a menudo enormemente exagerado» y resultado en parte de la política fiscal norteamericana y el bajo nivel de ahorro de sus ciudadanos, entre otros factores. «Además, el draconiano control de EEUU a la exportación de productos tecnológicos a China entorpece y distorsiona el comercio bilateral», concluye el artículo de opinión.
No obstante, pese al principio de acuerdo del sábado, EEUU no ha conseguido que China se comprometa a una reducción del déficit comercial de 200.000 millones de dólares, ya que en principio no se ha establecido un objetivo cuantitativo.