Fuente: https://es.panampost.com/sabrina-martin

Tras el ocultamiento de cifras oficiales, la Asamblea Nacional de Venezuela, de mayoría opositora, dio a conocer la escandalosa cifra de hiperinflación, que según las estimaciones cerrará en casi 100.000 %.

El diputado Ángel Alvarado señaló que la inflación proyectada para fin de 2018 es del 904.453 %, lo que convertirá al país suramericano en la nación con la inflación más alta en la historia de la región. “Venezuela está subiendo en el ranking de la hiperinflación más grande en la historia de la humanidad”, señaló el diputado.

Según los estudios económicos del Parlamento venezolano, la tasa anualizada de inflación en abril de 2018, respecto a abril de 2017, fue del 13.779 %, mientras que la tasa mensual fue de del 80,1 %.

Con estas escandalosas cifras se puede apreciar cómo el supuesto aumento de salario en Venezuela simplemente se diluirá en 100.000 % para finales de año. Por lo que si actualmente solo alcanza para comprar dos kilos de pollo, a fin de 2018 no alcanzará ni para la compra de un café.

Y es que en solo dos meses la inflación venezolana, la más alta del mundo, aceleró su vertiginoso ritmo, pasando del 4.966 % anual que registraba a finales de febrero, a más de del 13.000 %.

Hay que recordar que el pasado lunes 30 de abril Nicolás Maduro anunció un aumento del 95,4 % del ingreso mensual de los trabajadores, lo que, con base en esta hiperinflación, solo empobrece aún más a los venezolanos.

En abril la canasta básica superó los 75.000.000 (USD $125), lo que significa que hoy los venezolanos necesitan más de 30 salarios mínimos para poder sobrevivir. Sin embargo, especialistas pronostican que en los próximos días los ciudadanos igual necesitarán 75 salarios por la imparable hiperinflación.

Intervención de Banesco por razones políticas

En relación con la reciente intervención estatal de Banesco, el banco privado más grande de Venezuela, el diputado Rafael Guzmán señaló que la acción del Gobierno no se dio por razones “ni jurídicas ni económicas”.

“No es una medida jurídica, porque la responsabilidad penal es individual, y si había personas delinquiendo pues había que actuar contra ellas; tampoco es económica, porque el banco está solvente y no tiene problemas de liquidez; solo puede ser entonces una medida política”, dijo.

Alertó que el régimen de Maduro está buscando controlar la banca e inició con Banesco, que tiene el 25 % de los créditos y 20 % de los depósitos.

Señaló que ante la posibilidad de que los clientes del banco se vean afectados la Asamblea Nacional estaría analizando la creación de un “comité de usuarios”.