Trump niega uso de lenguaje vulgar en medio de reacciones de rechazo
El presidente Donald Trump negó el viernes en su cuenta de Twitter haber usado lenguaje vulgar al rechazar un plan bipartidista que le fue presentado para resolver el problema migratorio, y afirmó que si bien «el lenguaje que usé para hablar sobre el DACA fue duro…estas no fueron las palabras usadas».
«Lo que en verdad fue duro fue la extravagante propuesta que se me hizo —¡un gran retroceso para el DACA!», escribió 15 horas después de la reunión en la que supuestamente hizo el comentario.
De hecho, Trump no negó puntualmente haber dicho «países de m…». En un tuit posterior afirmó que nunca dijo «nada ofensivo sobre los haitianos, excepto, que obviamente Haití es un país muy pobre y turbulento. Nunca dije ‘sáquenlos’. Eso lo inventaron los demócratas».
«Probablemente debería grabar las reuniones futuras», se quejó el mandatario.
“El muro no estaba financiado apropiadamente, [la migración en] cadena y la lotería quedaban peor y EE.UU. se vería obligado a aceptar grandes números de personas de países de alta criminalidad que están muy mal. Yo quiero un sistema de inmigración basado en los méritos y en la gente que ayude a nuestro país a avanzar al siguiente nivel”, dijo el presidente para justificar su rechazo al plan.
“Los demócratas no están interesados en la vida y la seguridad, DACA ha retrocedido. Los ‘dems’ van a amenazar con el “cierre” [del gobierno], pero lo que en realidad están haciendo es cerrar el ejército, en un momento en que más lo necesitamos”, agregó.
Trump sorprendió el jueves a los legisladores que le presentaban en la Casa Blanca un plan provisional para resolver el problema migratorio, al presuntamente referirse a Haití y las naciones africanas como “países de m…”.
“¿Por qué tenemos a toda esta gente de países de m… viniendo aquí”?, preguntó el presidente, según medios como The Washington Post, The New York Times y CNN que lo reportaron primero.
ONU: declaraciones de Trump son racistas
La Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos (OACDH) de Naciones Unidas calificó el viernes como “racistas” presuntas declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump, quien habría cuestionado la llegada de inmigrantes de África y de Haití, diciendo que son “países de m…”.
Trump cuestionó el jueves por qué Estados Unidos quisiera recibir inmigrantes de Haití y naciones africanas, refiriéndose a algunos como “países de m…”, según dos fuentes familiarizadas con los comentarios.
“No hay otra palabra que se pueda usar sino ‘racista’”, dijo el portavoz del OACDH Rupert Colville, durante una rueda de prensa en Ginebra. “No se puede descalificar a países y continentes enteros como ”de m…“, (queriendo decir que) su población, al no ser blanca, no es bienvenida”.
En Sudáfrica, una funcionaria de alto rango del partido gobernante Congreso Nacional Africano (ANC) declaró que las palabras de Trump eran extremadamente ofensivas.
“El nuestro no es un país de m…, tampoco lo es Haití ni ningún otro país que esté sufriendo problemas”, dijo Jessie Duarte, subsecretaria general del ANC.
Trump dijo que Estados Unidos debería permitir entrar a gente de lugares como Noruega —un país de mayoría blanca—, cuya primera ministra se reunió con él en la Casa Blanca el miércoles, y de países asiáticos.
Los despectivos comentarios del mandatario a todo un continente, revivieron las acusaciones de que el presidente es racista, aunque Trump ha dicho que él es «la persona menos racista que alguna vez se haya conocido».
Respuesta de la Casa Blanca
Luego de que los medios, incluyendo la Voz de América, pidieran una reacción, el portavoz de la Casa Blanca, Raj Shah, emitió una declaración en la que dijo que el presidente solo aceptará un acuerdo inmigratorio que “contemple adecuadamente el sistema de lotería de visas y la migración en cadena —dos programas que perjudican a nuestra economía y permiten la entrada de terroristas a nuestro país”.
La migración en cadena es un término usado por los críticos antinmigrantes que se refiere al sistema que permite a los ciudadanos naturalizados patrocinar a miembros de su familia para que vengan a Estados Unidos.
La declaración del portavoz no negó los reportes de que el presidente utilizó un lenguaje vulgar cuando se refirió a Haití y África.
También subrayó que Trump siempre va a rechazar “las medidas provisionales, débiles y peligrosas que amenazan las vidas de los trabajadores estadounidenses, y socavan a los inmigrantes que buscan una vida mejor en los Estados Unidos a través de un camino legal».
La Voz de América también intentó contactar las oficinas de los legisladores que presuntamente estuvieron presentes en la reunión. Según The Associated Press, el personal de las oficinas de los senadores involucrados declinaron hacer comentarios sobre lo dicho por Trump.
Los comentarios del presidente se dieron mientras dos legisladores le describían los detalles de un acuerdo que protegería de la deportación a cientos de miles de jóvenes migrantes y reforzaría la seguridad en la frontera.
Los senadores esperaban que Trump apoyara su acuerdo y con ello terminara con una disputa que se ha extendido por meses sobre cómo proteger a los jóvenes inmigrantes conocidos como “dreamers”. Pero la Casa Blanca rechazó la medida propuesta, enviando nuevamente el tema a la incertidumbre a ocho días de una fecha límite que amenaza con paralizar el gobierno.
Durante su reunión, el senador demócrata por Illinois, Dick Durbin explicó que, como parte de la medida propuesta, se pondría fin a la lotería de visas que ha beneficiado a personas de países africanos y de otras naciones, explicaron las fuentes, aunque podría haber otra forma de que solicitaran el visado. Durbin apuntó que se permitiría que la gente que huyó de desastres en sus países de origen —incluidos los salvadoreños, guatemaltecos y haitianos — se quedara en Estados Unidos.
Entonces Trump cuestionó específicamente por qué Estados Unidos querría admitir a más personas de Haití. También mencionó a los países africanos y preguntó por qué más personas de “países de m…” deberían tener permitido entrar en Estados Unidos, señalaron las fuentes.
Haití
El gobierno de Haití a través de un comunicado declaró este viernes que las palabras que se le adjudican a Trump “refleja(n) una visión totalmente errónea y racista de la comunidad haitiana y su aporte a Estados Unidos”.
El comunicado también dice que las declaraciones del presidente estadounidense son “insultantes y censurables de ninguna manera reflejan las virtudes de sabiduría, moderación y discernimiento que deben ser cultivadas por cualquier autoridad política”.
Según algunos informes, Haití citó a un funcionario de EE.UU. para explicar los comentarios del presidente Trump. A su vez, la prensa reportó que el embajador haitiano en Washington, Paul Altidore, indicó que su gobierno presentó una queja ante la embajada estadounidense en Puerto Príncipe.
El Salvador
El ministro de Relaciones Exteriores de El Salvador, Hugo Martínez también se unió a la ola de críticas contra el presidente Trump por sus comentarios “vulgares” contra la comunidad haitiana y africana.
El gobierno de El Salvador se dio por aludido dentro de los comentarios de Trump e informó que han presentado una nota de protesta al gobierno estadounidense destacando en el documento los aportes de los salvadoreños a Estados Unidos.
A través de su cuenta de Twitter, Martínez resaltó los aportes de estas personas en ayudar a reconstruir el pentágono después de los ataques del 11 de septiembre de 2001 y Nueva Orleans tras el paso del huracán Katrina.
Reacciones bipartidistas en EE.UU.
Para el jueves por la noche, los legisladores y los países presuntamente mencionados —incluido El Salvador, que se dio por aludido—ya habían reaccionado a los supuestos comentarios del presidente.
El representante por Minnesota, Ilhan Omar, quien en 2016 se convirtió en el primer somalí-estadounidense elegido para un cargo legislativo estatal en Estados Unidos, emitió un comunicado en el que dijo: «No me avergüenzo del país donde nací. No me avergüenzo de llamarme a mí mismo un estadounidense ahora. Soy un inmigrante orgulloso, refugiado, minnesotano y un orgulloso legislador estatal”.
«Pero no se equivoquen, estoy avergonzado, molesto e indignado de que el líder de Estados Unidos no pueda ver más allá de su vergonzoso privilegio y que no pueda aceptar la diversidad que ha hecho que este país sea grandioso por generaciones», agregó Omar, miembro de el Partido Demócrata.
La representante republicana Mia Love, cuya familia proviene de Haití, dijo que los comentarios del presidente son «poco amables, divisivos, elitistas y contrarrestan los valores de nuestra nación. Este comportamiento es inaceptable por parte del líder de nuestra nación».
Love, de Utah, pidió a Trump que se disculpe con el pueblo de Haití.
El senador por Utah, Orrin Hatch, también republicano, dijo que quería más detalles «sobre los comentarios del presidente».
«Parte de lo que hace a Estados Unidos tan especial es que recibimos a los mejores y más brillantes del mundo, independientemente de su país de origen», agregó Hatch.
El senador de Arizona Jeff Flake, un republicano, tuiteó el jueves por la noche, «Mis antepasados vinieron de países no tan prósperos como el que vivimos hoy. Me alegro de que hayan sido bien recibidos aquí «.
La representante republicana por Florida, Ileana Ros-Lehtinen, tuiteó que el que Trump “llame a #Haiti ‘país de m…’ ignora las contribuciones que miles de haitianos han hecho a nuestra comunidad y nación #Sofla. Un lenguaje como ese no debería escucharse en los vestuarios y no debería escucharse en la Casa Blanca».
La senadora por California, Kamala Harris, una demócrata, dijo en un tuit: «Inmigrantes de países de todo el mundo, incluidos especialmente los de Haití y de todas partes de África, han ayudado a construir este país. Deben ser bienvenidos y celebrados, no degradados ni insultados».
El representante de Luisiana, Cedric Richmond, presidente del Congressional Black Caucus, dijo: «Los comentarios del presidente Trump son una confirmación más de sus puntos de vista racialmente insensibles e ignorantes. También refuerza las preocupaciones que escuchamos todos los días, que el lema del presidente ‘Hagamos a Estados Unidos grande otra vez’ es realmente el código para ‘Hagamos a Estados Unidos blanco otra vez'».
La representante por Nuevo México, Michelle Lujan Gisham, presidenta del Caucus Hispano del Congreso, respondió en un comunicado: «La declaración del presidente es vergonzosa, aborrecible, no presidencial, y merece nuestra más enérgica condena. Debemos usar nuestras voces para garantizar que nuestra nación nunca regrese a los días en que la ignorancia, los prejuicios y el racismo dictaron nuestra toma de decisiones”.
«La fuerza de nuestra nación y el sueño americano provienen de nuestras raíces y diversidad de inmigrantes», agregó.
Como los máximos beneficiarios de la ayuda estadounidense, algunos países africanos dudaron en arriesgar la ayuda que les da Estados Unidos al criticar a Trump, especialmente en momentos en los que su gobierno busca reducir la asistencia que brinda en el extranjero.
“A menos que lo haya dicho en referencia específica a Sudán del Sur, no tenemos nada que decir”, dijo el portavoz del gobierno sudanés, Ateny Wek Ateny a The Associated Press.
“Al paso que vamos, los viernes casuales en la Casa Blanca pronto incluirán capuchas y antorchas”, escribió el diario sudafricano Daily Maverick.
La declaración de la Casa Blanca publicada el jueves dice textualmente:
Ciertos políticos de Washington eligen luchar por países extranjeros, pero el presidente Trump siempre luchará por el pueblo estadounidense. El presidente solo aceptará un acuerdo de inmigración que aborde adecuadamente el sistema de lotería de visas y la migración en cadena, dos programas que perjudican a nuestra economía y permiten la entrada de terroristas en nuestro país. Al igual que otras naciones que tienen inmigración basada en los méritos, el presidente Trump está luchando por soluciones permanentes que fortalezcan a nuestro país al dar la bienvenida a aquellos que pueden contribuir a nuestra sociedad, hacer crecer nuestra economía y asimilarse a nuestra gran nación. Él siempre rechazará las medidas provisionales, débiles y peligrosas que amenazan las vidas de los trabajadores estadounidenses, y socavan a los inmigrantes que buscan una vida mejor en los Estados Unidos a través de un camino legal.