Momentos claves del funeral del Duque de Edimburgo
La misa del funeral de Felipe Mountbatten, Duque de Edimburgo, Consorte de Su Majestad la Reina Isabel II del Reino Unido, resaltó por ser una misa sencilla, solemne, pero muy emotiva y cargada de su personalidad, que ha servido para dar el último adiós al duque de Edimburgo, que descansa ya en el palacio de Windsor.
Desde muy temprano en la mañana los medios de comunicación del mundo y en especial del Reino Unido, han estado concentrados en las incidencias del sepelio. Celebrado bajo la exquisita puntualidad de los británicos. Muchos medios de comunicación, se unieron a la transmisión oficial por el canal de YouTube de la Casa Real, y cadenas televisivas lo han retransmitido desde el recinto de Windsor y en la capilla de San Jorge, visto por millones de espectadores en el mundo.
Momentos claves
- Entre los momentos claves está la presencia a solas de Elizabeth Alexandra Mary, Su Majestad la Reina Isabel II del Reino Unido, en la capilla, cerca del féretro del Duque. Quizás uno de los episodios más tristes y dolorosos en todo su reinado. Cabe destacar que la despedida al Duque de Edimburgo, se realizó como se merecía y como él mismo y su ya viuda, la reina Isabel II, han querido.
- El encuentro más esperado entre Harry y William. Los nervios de Harry marcaban su presencia. Reflejada en la tensión entre los hermanos. La vuelta al Reino Unidos de Harry, y su intervención en el programa de Oprah Winfrey marcó el reencuentro familiar tras el ‘Megxit’. De ahí que no pudiera evitar que se le notaran los nervios. En cambio, su hermano, William y su primo Peter Phillips, mostraban la solemnidad que el caso ameritaba. Por su parte William no dejaba de mover los dedos de sus manos. Un típico gesto muy propio de su lógico nerviosismo.
- Antes del funeral, fue depositada una corona de flores de parte de los duques de Sussex, diseñada por Willow Crossley, el encargado de los arreglos florales para las celebraciones nocturnas de su boda en Frogmore Gardens y para el bautizo de Archie. Tenía depositada una tarjeta manuscrita por la propia Meghan, de quien es muy conocido su gusto por una caligrafía trabajada y pulcra.
- El Príncipe Carlos y sus lágrimas incontenibles. Aunque siempre se ha dicho que el protocolo debe estar por encima de los sentimientos en la Casa Real. Pero en esta oportunidad, ha sido diferente y opuesta, ya que muchos de ellos se han dejado llevar por la emoción propia del momento. Se dejó ver un príncipe Carlos muy emocionado, afligido, algo verdaderamente inusual en él.
- Todo estuvo acordado con el mismo Duque de Edimburgo,quien dio instrucciones bien precisas que dio en vida, de cómo quería su despedida. Desde la música, las insignias y condecoraciones en el altar, además del Land Rover donde se ha llevado su ataúd, envuelto en su bandera con su escudo de armas, junto a su espada y su gorra. Pero uno de los homenajes más emotivos ha sido la presencia del coche de caballos que él mismo diseñó, con dos de sus ponis, Balmoral Nevis y Notlaw Storm. Otro detalle es que en el asiento del carruaje, estaban la gorra, los guantes y la manta que el duque de Edimburgo solía utilizar cuando montaba.
- La asistencia de Lady Penny Knatchbull. La duquesa Mountbatten de Birmania, amiga cercana tanto al duque de Edimburgo como a la reina Isabel y su presencia se debía, sobre todo, a la imposibilidad de su marido de asistir por su delicado estado de salud.
- Familia “unida” era la imagen a mostrar. En la capilla San Jorge, la monarca siempre tiene su puesto asignado en este templo. En su mismo banco, justo en el otro extremo, estaba el príncipe Harry, quien ha protagonizado en la iglesia una imagen de absoluta soledad, impuesta por las circunstancias, pero muy gráfica de la situación actual. Separado por solo tres asientos estaba el príncipe Andrés, que a pesar de los escándalos sigue siendo el ojito derecho de su madre.
El duelo
Por la muerte del Duque de Edimburgo, Consorte de Su Majestad la Reina Isabel II del Reino Unido, habrá un período de Duelo Nacional que comenzó el viernes 9 de abril hasta el sábado 17 de abril, día del funeral inclusive. Esto significa que las banderas de la Unión se ondean a media asta en las residencias reales, los edificios gubernamentales, los establecimientos de las Fuerzas Armadas y los Correos del Reino Unido en el extranjero. Por su parte la reina Isabel II, desea que la Familia Real observe dos semanas de Duelo Real, junto con las tropas comprometidas con los deberes ceremoniales. Durante este período, los miembros de la familia real continuarán asumiendo compromisos adecuados a las circunstancias. Se usarán bandas de luto cuando sea apropiado.
Fuente: Youtube Casa Real, Stern, Mirror y Vanity