39 muertos en primer día de choques entre Armenia y Azerbaiyán
Ese es el saldo de las primeras 24 horas en combates entre separatistas de Nagorno Karabaj, apoyados por Armenia, y las tropas de Azerbaiyán.
Los combates que estallaron el domingo, los más mortíferos desde 2016, causaron inquietud internacional y llevaron a la ONU, a Rusia, Francia y Estados Unidos a pedir un alto el fuego inmediato.
Turquía, por su parte, aportó su apoyo total a Bakú (capital de Azerbaiyán), por lo cual y Ereván (capital de Armenia) lo acusó de injerencia política y militar en el conflicto.
El ministerio de Defensa de Nagorno Karabak, provincia secesionista de Azerbaiyán habitada en su mayoría por armenios, reconoció la muerte de 32 militares desde el inicio de las hostilidades.
Cinco civiles azerbaiyanos y dos civiles armenios de Karabaj también fallecieron, elevando a 39 el total de muertos. Por el momento, Azerbaiyán no dio cuenta de eventuales bajas militares.
Sin embargo, el balance podría ser más grave ya que los dos campos afirman haber infligido centenas de pérdidas al adversario, difundiendo en particular imágenes de blindados destruidos. Bakú afirma haber matado a 550 soldados enemigos y Ereván dice haber eliminado más de 200.
El ministerio de Defensa de Nagorno Karabaj afirmó, por otra parte, que había reconquistado posiciones perdidas el domingo. A su turno, Azerbaiyán afirmó que había conquistado más territorios.
Las fuerzas armadas azerbaiyanas “atacan las posiciones enemigas con cohetes, artillería y la aviación” y “tomaron varias posiciones estratégicas en los alrededores del pueblo de Talych. El enemigo retrocede”, afirmó el ministerio de Defensa de Azerbaiyán.
En los últimos años, Azerbaiyán destinó una parte importantes de sus ingresos petroleros a la compra de armamento.
Azerbaiyán perdió el control de Nagorno Karabaj tras el derrumbe de la Unión Soviética y después de una guerra que dejó 30.000 muertos y concluyó con un alto el fuego firmado en 1994.