Orinar con mucha frecuencia: La señal de alarma que no debe ignorar

La necesidad constante de ir al baño, conocida clínicamente como micción frecuente o polaquiuria, es una de las consultas urológicas más comunes. Contrario a la creencia popular de que siempre se debe a beber mucha agua, especialistas advierten que, si el síntoma persiste, es un claro llamado del cuerpo para una evaluación médica urgente.
Más Allá de la Hidratación: Las Verdaderas Causas
«La micción frecuente solo es benigna cuando se debe a un consumo extraordinario de líquidos, cafeína o alcohol,» explica el Dr. Carlos Campos ], urólogo de la Clínica Santa Fé en Bogotá ]. «En el resto de los casos, la polaquiuria es un síntoma cardinal de condiciones que van desde una infección simple hasta enfermedades crónicas graves.»
Las causas más frecuentes y preocupantes incluyen:
Infecciones Urinarias (ITU): Especialmente en mujeres, la urgencia y frecuencia se acompaña de dolor o ardor (disuria).
Problemas de Próstata (en hombres): El agrandamiento prostático (Hiperplasia Prostática Benigna o HPB) presiona la uretra, impidiendo el vaciado completo de la vejiga.
Diabetes no Controlada: La necesidad del cuerpo de eliminar el exceso de glucosa en la sangre a través de la orina se traduce en una frecuencia excesiva y aumento de la sed.
Vejiga Hiperactiva (VH): Un trastorno nervioso-muscular que provoca contracciones involuntarias de la vejiga.
Cálculos y Tumores: En raras ocasiones, puede ser indicio de cálculos o, en casos más graves, de cáncer de vejiga.
El Momento de Actuar: Señales de Alarma
Sangre en la Orina (Hematuria): Un síntoma que requiere atención inmediata.
Nicturia Severa: Despertarse más de dos veces por noche, lo cual interrumpe seriamente el ciclo de sueño.
Flujo Urinario Débil o Dificultad para Orinar: Sugiere una posible obstrucción (común en casos de HPB).
Fiebre y Dolor Lumbar: Podría indicar que la infección ha alcanzado los riñones (pielonefritis).
«Ignorar una micción frecuente que presenta estas características es un error grave,» advierte el Dr. Campos. «Un diagnóstico y tratamiento tempranos pueden resolver rápidamente una infección o controlar una enfermedad crónica, evitando daños mayores a los riñones y al sistema urinario.»
Se recomienda a la población afectada que consulte a su médico de cabecera o urólogo para realizar un simple análisis de orina y descartar causas serias.
